Poemas, compilaciones, presentaciones, concursos literarios, y mucho más con relación a las letras, es el mundo dónde Marisa Avilés Arreola se ha sumergido a lo largo de su trayectoria como estudiante y profesionista, para que crezca el gusto por la literatura.
El patio central de la Pinacoteca de Ciudad Victoria, fue el escenario de preguntas y respuestas de la profesionista que según sus palabas, “mamó” las letras desde pequeña, por que recibió impulso de su madre, María Isabel Arreola y de su padres Carlos Adrián Avilés.
Para ella es importante tener con quién compartir esa pasión por las letras, “así como hay gente que organizan grupos de ciclistas, de golf, de diferentes deportes y hobby; los que escribimos necesitamos con quién dialogar a quien darle el texto, lecturas o libros con quien compartir”.
Por fortuna, dice, en Tamaulipas cada vez hay más colectivos, que hacen buenos trabajos; en Matamoros, Nuevo Laredo, Reynosa, tres en Victoria que se están integrando y en Tampico que es cuna de escritores por excelencia.
Su gusto por las letras, señala, además de escribir, realiza trabajo para promover el trabajo de otros, desde recomendar libros, “casi siempre me hablan, comparto o dono libros”, porque con apoyo de su madre, que recibe donaciones de acervos literarios; realiza una selección y luego donan material a bibliotecas de escuelas.
Pero además la invitan a presentar libros o plaquets, “es un servicio gratuito que hago, siempre y cuando me guste el texto”, por ello, su orientación por la escritura la ha llevado a diversos temas.
“Antes estaba orientada a la poesía, ahora estoy a la narrativa”, platica mientras habla de algunos de sus textos que tiene por título Micro Relatos Cortos, que vio la luz con el Colectivo Alef.
Esos escritos son lo que calificó como “unos dardos mordaces, tiernos y reflexivos, que pueden ser interesantes; es una forma diferente de hacer las cosas”.
Y para demostrarlo nos da una muestra:
“Como este que dice…. Era tan abnegada que hasta el día del sepelio de su marido levanto su casa, barrió, trapeó y lavó todo con sumo cuidado para borrar cualquier evidencia”.
De ese libro, dijo que los dibujos son de Joaquín García Quintana, el dinero recaudado por la edición, sus autores lo donaron para apoyar publicaciones de nuevos escritores
Otra de sus obras, la editó para promover la obra de Francisco de P. Arreola, “mi querido abuelo; hicimos este espacio; ‘Porque Te Quiero’, que está integrado por poemas de su abuelo y poemas de su autoría personal, “son más los míos, los de él son muy extensos”.
Un tercer libro que vio la luz en 2018 cuando el ITCA convocó, “competimos y seleccionaron 3 de novela, tres de poesías, dos de cuento y dos de historia, quede en cuentos el texto lleva por título, Lascas, Relatos y Ficciones”.
En la primera parte habla en relatos breves, de su estancia en un colegio de religiosas en Victoria, “es algo crítico, mordaz y tierno”.
Reconoce que autoridades de cultura han impulsado el trabajo de escritores tamaulipecos, pero su gusto personal, es difundir a escritoras tamaulipecas.
La tarea que realiza al igual que sus compañeros que participan en difundir la creación literaria, no tiene el propósito de obligar o generar un gusto o aprecio a la fuerza.
“Más que querer convencerlos, mis compañeros escritores y yo vamos a compartir, a decirles leeí esto y me gusta por esto, buscamos educarlos”
Y da como ejemplo,en el parque la Loma “hay unos dibujos y esta el dibujo y nos ves nada… pero ahí Yuri, puso unos pies y dice; eso se debe ver desde aquí, para que los veas en su magnitud”, desde su perspectiva esa no es de imposición es para enseñarnos a ver.
Reconoce que no todo es para todos, “en una familia a unos les gusta cierta comida, unos son tigres o rayados, como en Monterrey y a veces a alguien le gusta pintar, la música, bailar cada quien tiene su forma de expresarse”.
Actualmente, platica, acude a Tampico a un taller llamado: “Como Leer en Voz Alta” que imparte la Doctora Ana Díaz Alejos, porque en su gusto por difundir a las grandes autorías tamaulipecas como; Isaura Calderón de Tula, Altaír Tejeda de Tamez, Graciela González Blackaller y Carmen Alardín, busca leerlas en forma adecuada.
Aunque también le gusta leer a autores varones, aclara, “a mí y me interesa que los tamaulipecos conozcan más a poetas mujeres, también leo hombres pero esas están más publicados, celebrados, difundidos, honrados y leeídos que las mujeres”:
Para Marisa leer, escribir o difundir letras es su fiesta, su gusto, su goce, por eso comparte todo lo que puede en los espacios que le abren.
Una mujer feminista
Avilés Arreola, se reconoce como una mujer feminista, en una de sus publicaciones en su cuenta social de Facebook se lee: “hoy me toca AGRADECER a todas las feministas; de cualquier partido, de derecha, centro o de izquierda; de cualquier religión, etnia o nacionalidad, jóvenes, maduras o ancianas, el derecho de PODER: votar; estudiar una carrera profesional; trabajar con un salario igual al de un hombre; practicar deportes sin distinción de género; heredar y poseer propiedades; decidir sobre mi cuerpo y sobre si quiero casarme o no, divorciarme o no; comprar y tener propiedades a mi nombre; recibir información sobre el control natal y sobre la fertilidad y decidir; dejar de servir a mis familiares; dejar de ser la cuidadora única de la familia, de los patios, de las mascotas y de las relaciones; ser licenciad@ o médic@ o contador@; usar pantalones; prohibir legalmente a mis jef@s presionarme para tener sexo; iniciar un negocio; obtener un préstamo; decidir o no ser madre cuando quiera, si lo quiero; penalizar a quienes compartan imágenes íntimas en redes; poder optar por casarme con quien yo decida, sea con un hombre o con una mujer; denunciar y penalizar a quien me agreda física, moral o emocionalmente…y un largo etcétera”.
De forma sencilla, clara, simple, para ella el feminismo es una búsqueda de igualdad de derechos, sin más polémica, sin más pleito, que cada quien la ejerza de acuerdo a su conciencia.
Considera que no ha sido fácil el camino, porque es muy difícil tomar conciencia no solo a los hombres, sino a toda una sociedad sobre como están las cosas, no es lo ideal y pudieran estar mejor para la mitad de la humanad, es decir las mujeres.
Muchos gobiernos se enfocan en la desigualdad económica y política, cuando deben centrarse en la desigualdad de privilegios y apoyos, “en todos sentidos ellos van en caballo de hacienda, con los semáforos en verde, desde permisos para salir, la ropa, incluso como poetas o escritores no les gustan algunos temas que tocamos”:
Dicen muchos que las mujeres deben escribir solo linduras, dicen que ahora las mujeres toman, es su derecho insiste, “ya cada quien de acuerdo a su conciencia, puede decir por otra opción”:
Por eso acepta que le da mucho gusto que más allá de partidos, gobiernos o religión, las mujeres tengan solidaridad por su causas, sus derechos y condiciones
“No necesitamos la venia, permiso, o autorización de ningún hombre, ahora se han querido apropiar del protagonismo”; dice en relación al 9 de Marzo y el paro de mujeres.
Es aquí cuando manda una invitación a los varones “les invito a reflexionar sobre sus formas de ser hombre, sobre masculinidades, a ellos también les ha de pesar el hecho de ser el macho cabrío proveedor de todo, acaban muy explotados, también hay una vuelta de tuerca que les esclaviza a ser eso”.
Insiste en la necesidad de lograr un feminismo más adecuado, con el apoyo de hijos, de esposos, la pareja, los hombres en general, para lograr el éxito de la mujer en cualquier ámbito.
Porque el éxito es muy subjetivo y relativo, cada mujer tiene una idea muy personal, pero te abre caminos.
Al hablar de sus publicaciones, platica sobre su mayor satisfacción personal, “la literatura es un gozo, es un camino de aprendizaje y conocimiento, a nivel colectivo su satisfacción es compartir su pasión por las letras y motivar a algunos.
Decepciones, si hay, que celebren a autores que no tienen méritos, y “cierta decepción de mi como lectora, porque a veces siente que le falta más ojo o aprecio para las letras.
Finalmente hizo una petición a Expreso; ojalá que en Rostros de la Ciudad, el espacio sea un regalo, para los lectores y entrevistados, no para exaltar al entrevistado y a los lectores en general, pidió querer más a Victoria, por ser una gran ciudad de historia y arraigo.