TAMPICO, TAMAULIPAS.- La Diócesis de Tampico dio a conocer que mantendrá las 68 parroquias abiertas en sus horarios habituales pero suspenderán las clases de catecismo para no exponer a los menores además de pedirle a los sacerdotes que de ser posible den la misa en lugares abiertos y que sus homilías sean breves.
A través de un comunicado el obispo de la diócesis de Tampico, José Armando Álvarez Cano, señaló que en estos momentos de sensibilidad espiritual, es necesario mantener los templos abiertos en sus horarios habituales para que las personas tengan la oportunidad de acudir a su oración personal o en pequeños grupos.
Mientras que en el caso de todos aquellos fieles que deseen participar en la misa en las parroquias, el obispo les pide que observen todas las medidas de higiene dispuestas por las autoridades sanitarias.
Resaltó que si alguna persona presenta síntomas de resfriado debe abstenerse de asistir y desde su casa, mantenerse en oración.
De igual manera señaló que, durante la celebración de la santa misa el signo de la paz debe continuar ofreciéndose con una reverencia y evitar el saludo de mano a la par de continuar recibiendo la comunión en la mano durante todo el tiempo que dure la contingencia sanitaria.
También se pidió que se suspendan las reuniones de los grupos y movimientos laicales, que se reúnen en cada parroquia decanato o diócesis para evitar riesgos.
“ Las personas que consideren en conciencia que no es conveniente asistir a las celebraciones eucarísticas, quedan dispensados de la obligación de asistir a la misa dominical y fiestas de precepto pero podrían aprovechar las celebraciones que se transmiten por los diversos medios de comunicación rezando el rosario en familia o leyendo la palabra de Dios” indicó .
El máximo representante de la Iglesia Católica en Tampico señaló que ante la emergencia sanitaria que sucede es una oportunidad de intensificar y fortalecer la confianza en Dios orando por todas las personas y países que pasan por momentos difíciles ante el azote de esta enfermedad.
Álvarez Cano pidió a todos los fieles católicos evitar situaciones de pánico y ayudar especialmente a los niños y a las niñas a comprender esta situación que se vive en un ambiente de naturalidad y responsabilidad.