PUEBLO VIEJO, VER.- El intenso sol cae de manera inclemente sobre las calles de Pueblo Viejo.
Con ello el esfuerzo para hacer andar el triciclo en el que don Nabor García del Ángel traslada sus nieves, es mucho mayor.
La suspensión de clases afectado gravemente al sector del comercio ambulante, ya que los planteles educativos siempre han sido excelentes puntos de venta.
Sin embargo la pandemia del coronavirus a venido a cambiar todo el panorama que ahora luce gris y complicado
Por ello ctualmente vendedores de nieve de garrafa de preparación artesanal, como Don Nabor ,tienen que multiplicar sus recorridos en busca de clientes.
Con cerca de 10 años dedicado a la venta de paletas y nieves, don Nabor indicó que durante este año las ventas han sido muy pocas y el trabajo prácticamente se ha duplicado.
Dijo que cada día es más complicado ganar el sustento diario ya que por el temor al covid-19 19 mucha gente no sale de sus hogares.
A ello se suma el desempleo y la falta de dinero de las familias que no permiten darse ni siquiera el lujo de comprarles una nieve a sus hijos.
Esta situación no solamente golpea a don Nabor, comerciantes ambulantes como la señora teodula Ramírez Alcocer que con 77 años de vida,