El “Oro líquido” tamaulipeco llegará próximamente a Europa y Asia a través de la marca “MieLlera”.
Más de 350 productores apícolas de Llera de Canales y otras localidades rompen fronteras y se alistan para exportar 800 toneladas de miel de abeja, pura y natural con destino a Bélgica, Alemania y Emiratos Árabes Unidos; lugares donde monetariamente se cotiza este producto por su calidad, exquisito sabor y delicada fragancia.
Este logro, se cristaliza después de 70 años de arraigo de la actividad ganadera en esta parte de Tamaulipas, mediante el proyecto de la Sociedad de Productores Apícolas del Guayalejo y la Sala de Extracción de Miel construida con aportación del gobierno estatal.
La obra, pero ante todo, la unión y visión de los productores llerenses, logrará la eliminación del “coyotaje” que afecta en gran medida a la producción, puesto que los intermediarios tradicionalmente compran el producto a bajo costo y se lo llevan virgen a plantas certificadas en el estado de Nuevo León y de ahí se exporta a Japón y Alemania a excelente precio, pero con marcas registradas de otras entidades del país.
Con la exportación directa, Tamaulipas por primera vez contará con el reconocimiento internacional.
La sala de extracción de miel cuenta con certificación y está a punto de arrancar actividades en el mes de octubre; en próximas fechas su personal será capacitado para el manejo de maquinaria y equipamiento de alta tecnología que extraerá la miel de las colmenas de forma inocua y eficiente.
Tiene una capacidad para obtener hasta 12 toneladas diarias de miel de las variedades; cítrica, multiflora y mezquite.
La sociedad “Productores Apícolas del Guayalejo”, pretende aglomerar hasta 350 apicultores de 11 municipios más de Tamaulipas, como; Güemez, Padilla, Aldama, Soto La Marina, El Mante, Ocampo, Gómez Farías, Xicoténcatl, González, Antiguo y Nuevo Morelos e incluso extenderán la invitación a productores de San Luis Potosí y Nuevo León a fin de satisfacer las necesidades del mercado internacional.
José Guadalupe Arcos Cavazos, representante de los Productores Apícolas del Guayalejo, dijo que la venta directa permitirá obtener mayores ingresos en beneficio de cientos de familias que dependen de ello.
El “coyotaje” ha dañado la economía por varias décadas y por ello los productores se han unido para acabar con este mal.
“Se llevan la tajada del león, es como cuando las leonas cazan la presa, llega el macho y les quita, y si sobró comen, y si no pues no, así nos sentimos”.
La producción de miel ha vivido momentos variables, principalmente por el cambio climático, la deforestación y la introducción de productos chinos adulterados que ostenta el nombre de miel en el mercado mexicano.
En este 2020 la industria de la Miel se ha vuelto indispensable para el sector salud, cosmético, alimenticio y farmacéutico en varios continentes, y se coloca como uno de los productos de origen animal más comercializados a nivel mundial.
México ocupa el tercer lugar de exportación y es el sexto lugar en producción internacionalmente.
SALA DE EXTRACCIÓN IMPULSARÁ LA ACTIVIDAD APÍCOLA
En los últimos dos años, el número de productores en la zona se incrementó al cien por ciento debido al interés por participar en este proyecto productivo que se vislumbra como el detonante económico regional.
“Somos 25 productores que nos unimos para aportar en el proyecto de la sala de extracción, pero ahora somos más, hay 200 apicultores en Llera que le apuesta a la producción de miel” apuntó José Guadalupe Arcos.
Aseguró que la apicultura, se fortalece por ser una actividad noble, que no requiere alta inversión ni grandes superficies para atenderlas colmenas.
Y además con esta actividad, la juventud ha detenido la migración a Estados Unidos, que después de los años 90 se apuntaló.
LLERA Y LA PRODUCCION DE MIEL
La legendaria Llera de Canales, a 272 años de su fundación, es una localidad con abundante riqueza natural que permite que la apicultura se facilite y se encause como una de las principales actividades económicas.
Sobreviven de la labor más dulce poco más de doscientos hombres y mujeres; ellos dispersan más de 500 mil abejas y 8 mil colmenas en campos citrícolas y en las verdes praderas de las faldas de la sierra madre, durante primavera y verano.
En esta zona se genera la miel de azahar, multiflora y mezquite. A nivel internacional se clasifica en colores; extra clara, clara y ámbar.
La miel de azahar que se extrae de la flor del naranjo, es la mejor comercializada por su textura y pureza, seguida de la multiflora; en este año se comercializó en 58 pesos el kilogramo; mientras que la del mezquite se vendió en 35 pesos.
Margarito Limas Noriega, es el decano de los apicultores y lleva más de 55 años comercializando los derivados sistema producto miel; como cera, jalea real, propóleos, polen y veneno.
Asegura que a estos productos se les atribuyen diferentes propiedades curativas; para el refuerzo del sistema inmunológico y respiratorio, además es un alimento, con riqueza en vitamina B; y también son utilizados para mascarillas, shampoo, medicamentos y cremas.
LA POLINIZACIÓN ES UNA ALTERNATIVA
En tanto en ciudad Mante, Miguel Horacio de la Torre Onofre, presidente de asociación de apicultores “Huasteca Tamaulipeca” informó que quienes no logran vender sus productos en la región o comercializar con intermediarios, rentan sus colmenas como alternativa para la polinización de los campos de cultivo de hortalizas y frutales.
Esta actividad se realiza entre los meses de febrero a junio y consiste en llevar las colmenas a los campos de cultivo para que la abeja polinice los plantíos; indicó que especialmente se efectúa en las siembras de melón, sandía, calabaza y pepinos, ello, en los comunidades de la zona temporalera en El Mante y zona rural de González.
Estudios comprueban que con la polinización los frutos resisten a las plagas y su crecimiento es mayor.
Del 2018 a la fecha, 30 productores apícolas de la región Mante rentan las colmenas para este proceso; su recaudación económica es de 600 a 900 pesos por colmena durante un periodo de hasta 60 días.
Cabe mencionar que la mayoría de los apicultores de la asociación “Huasteca Tamaulipeca” han resultado ser mujeres, nativas de los municipios de Antiguo y Nuevo Morelos, en donde esta actividad se ha fortalecido por años como una alternativa económica en aquel lugar.
Por Andrea Espinoza / Fotos Raquel Osorio