Esta semana en la Sesión de Cabildo de Victoria se hizo historia.
Durante la Cuadragésima Primera Sesión Ordinaria del Ayuntamiento, que viene siendo la reunión 41 de esta administración, se votó por primera vez un Reglamento de Participación Ciudadana.
La importancia, básicamente, radica en que por primera vez hay un reglamento de este tipo, no existe otro igual o parecido en el estado de Tamaulipas y con su aprobación, Victoria se pone a la vanguardia de las administraciones municipales que involucran a los ciudadanos en la toma de decisiones.
Más allá del discurso, su correcta aplicación permitirá darle mayor legitimidad al trabajo del Ayuntamiento y con ello, por obviedad, generar más confianza entre la población en el trabajo que realizan sus autoridades, además este proyecto permitirá tener mejores mecanismos de transparencia en la ejecución de los recursos.
En resumen podemos destacar los mecanismos clave de este reglamento, que son la creación de comités vecinales, la audiencia pública, la consulta vecinal, el presupuesto participativo, la iniciativa ciudadana y además contar con una observadora ú observador ciudadano.
Particularmente los últimos 3 que le menciono, son completamente innovadores en Tamaulipas, explico un poco, el presupuesto participativo busca que los ciudadanos organizados, ya sea en fundaciones, agrupaciones o asociaciones civiles, puedan proponer proyectos de obras y servicios y cómo ejecutar una parte de los recursos públicos.
Por otra parte, la iniciativa ciudadana daría a la población la posibilidad de presentar una propuesta de modificación, derogación, creación, incluso abrogación de reglamentos municipales, así como lo lee, sin ser parte de las cabezas de la administración, ciudadanos comprometidos podrían influir directamente.
Mientras que el observador ú observadora ciudadana se plantea como un mecanismo de gobierno abierto, donde se dará oportunidad a la población de observar y hacer propuestas de mejora a la administración municipal.
Qué cree, Victoria abre la puerta para que cualquier ciudadano pueda llegar a la Presidencia Municipal y observar que las cosas se estén haciendo bien, parece increíble pero ya se aprobó.
Durante la sesión, lo que más sorprendió fue la votación por unanimidad que recibió el proyecto. El Alcalde, ambos Síndicos y todos los Regidores alzaron la mano en favor de la propuesta presentada por el regidor HORARIO REYNA DE LA GARZA, presidente de la Comisión Municipal de Participación Ciudadana.
El edil de extracción priísta, trabajó en el proyecto por más de un año con sus compañeras de comisión, integrado por las regidoras SONIA TAMÉZ del PAN, MARÍA DEL ROSARIO de MORENA, KARLENY PERALES de MC y GLADYS NERY, perredista ahora declarada independiente.
Sin duda el trabajo de cabildeo realizado por el joven político dejó a más de uno sorprendido, y aunque al momento de levantar la mano algunos titubearon, finalmente todos votaron a favor.
La aprobación de este Reglamento de Participación Ciudadana evidencia que la forma de hacer política está cambiando, que el involucramiento de la ciudadanía en la toma de desiciones, pero de forma responsable y organizada, son parte fundamental de cómo deben operar las administraciones municipales.
En verdad espero que este modelo sea analizado y replicado por los demás municipios de Tamaulipas, se avanzaría en la creación de políticas públicas, en la aplicación del recurso municipal y se garantizaría una mayor transparencia en el gasto oficial.
Échenle un ojo.
QUE CURIOSO
Hablando de innovación en la política, ahora que ya se están perfilando prospectos a ocupar las candidaturas, varios jóvenes están adelantando en las preferencias.
Es de esperarse que aunque son jóvenes quienes se están posicionando, hay ya viejos lobos de mar que quieren “sumarles”, sin embargo, más de uno está apostando por pura “sangre nueva” para impulsar sus proyectos.
Usted ya debe saber quienes son esos pocos con altas probabilidades de aparecer en las boletas el próximo año, CARLOS FERNÁNDEZ, MON MARÓN, MARIO RAMOS Y RENÉ SENTIES, todos panistas, y están trabajando para que no les impongan a la “vieja guardia”.
POR OMAR REYES