Como lo hacen los ladrones, los diputados federales de MORENA y sus compinches, aprovecharon la madrugada para aprobar en lo general el Presupuesto de Egresos de la Federación 2021, al que no le cambiaron una sola coma, como se los ordenó Andrés Manuel López Obrador y con el ‘albazo’ el daño a Tamaulipas.
Así es mis queridos boes, aunque fueron 297 los diputados federales afines a la 4T los que aprobaron sobre las rodillas el presupuesto, lo que a los tamaulipecos nos debe interesar es quienes traicionaron a Tamaulipas y a su pueblo.
Con nombre y apellido, los que prefirieron faltar a su palabra, que se lleven los recursos de Tamaulipas a los estados del sur, que el año que entra en sus distritos falte mucho más de lo que este año ha faltado son: el de Madero, Erasmo González Robledo (presidente de la Comisión de Presupuesto); el de Reynosa, Armando Zertuche Zuani; la de Tampico, Olga Sosa Ruiz; el Río Bravo, Héctor Villegas González, la de Matamoros, Adriana Lozano Rodríguez, la reynosense, Nohemí Alemán Hernández y la de Nueva Ciudad Guerrero, Olga Juliana Elizondo Guerra.
Pongo de donde son, porque pese a la traición contra los suyos, la mayoría de los que aprobaron el golpazo financiero a Tamaulipas sueñan con gobernar sus municipios, ser reelectos y hasta ser candidatos a gobernador allá por el 2022.
A “Los 7 traidores” habrá que escribirles en piedra que fue su decisión quitarle a Tamaulipas más de 7 mil 200 millones de pesos de presupuesto y para el 2021. Su palabra empeñada, de traer recursos suficientes para sus distritos, se fue a la basura, de velar por los intereses de sus representados les valió cacahuate.
A Erasmo González Robledo, por ser el presidente de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública, hay que facturarle mayor responsabilidad, porque no hizo el más mínimo esfuerzo por perjudicar lo menos posible al Estado. Y si, aunque ustedes no lo crean, Erasmo González, quien ya había traicionado al PRI y ahora traiciona a todo Tamaulipas se ha creído que puede ser gobernador del Estado, porque le ha servido al nuevo dirigente (líder es otra cosa) Mario Delgado para operar el desvío de recursos de la cámara hacia la campaña millonaria que lo llevó a la presidencia de MORENA.
Erasmo González primero tiene una cita el año que entra en Madero, ya sabe que no podrá ser candidato a la Alcaldía, porque ese sitio está reservado para el presidente municipal Adrián Oseguera, pero le apuesta a ser reelecto como diputado federal. ¿Con qué cara se va a presentar Erasmo González ante los ciudadanos de su municipio y los de Altamira a pedir que lo reelijan, cuando en este 2020 no ha bajado la mitad de un peso para esos municipios? ¿Cómo cree que los ciudadanos lo van a volver a llevar al Congreso, si le valió gorro dejar sin recursos al Estado y sus municipios para obras de infraestructura, si avaló la desaparición de fondos y fideicomisos que eran de beneficio para ellos?.
A Erasmo González en Madero la administración municipal le ha reclamado la falta de apoyo en estos dos años, nada le deben, al contrario ha sido culpa de él y sus correligionarios que a Tamaulipas le hayan destinado cero pesos para atender el tema de la seguridad.
Es culpa de ellos que no habrá dinero para obras de infraestructura que tanto se necesitan por todo el territorio estatal. A ellos habrá que echarles en cara que no habrá apoyos al campo, recursos para salud en plena pandemia, ni para la educación. Insisto, que no se nos olvide porque “los 7 traidores” querrán volver a engañar al pueblo pidiendo el voto, ofreciendo defender sus intereses, cuando desde hoy, ya les han garantizado un 2021 que se caracterizará por la jodencia. Ayer por la tarde veía el video en el que Erasmo González Robledo trataba de justificar lo que no tiene justificación.
Disfrazado de profesor, marcador en mano y pintaron lleno de números, Erasmo pedía a los tamaulipecos que no se dejaran engañar con datos que no son exactos. En su intento por confundir y justificar insistió en que Tamaulipas recibirá el año que entra poco más de 600 millones de pesos más que en el 2020.
Aunque no le quedó más que reconocer que en términos reales; es decir aplicando la inflación, esos millones de más en realidad no suman, por lo que según él “el decrecimiento”, así lo dijo para no mencionar recorte, de es de casi 3 por ciento.
Él sabe que es mucho más. Y como para consuelo, dijo que Tamaulipas es de los estados donde menos decreció el presupuesto; es decir a los que menos les mocharon. Lo que Erasmo Robledo no dijo y no va a decir, es que en este 2020 Tamaulipas ha gastado cientos de millones de pesos para atender la emergencia del Covid-19, incluso apoyando con equipo y material al IMSS e ISSSTE porque la 4T los abandonó a su suerte.
Todos esos millones de gasto extraordinario por la pandemia no merecieron un solo peso de recursos extraordinarios de la Federación a la que los de MORENA le aprueban hasta puñaladas. Tampoco dice Erasmo y compañía, que para el 2021 tampoco hay un solo centavo extraordinario para atender a los enfermos del Covid, por lo que a Tamaulipas le corresponderá poner recursos para tratar de salvar las vidas que a la 4T le valen que se pierdan.