6 diciembre, 2025

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Tres años de sangre…

CONFESIONARIO / MELITÓN GARCÍA DE LA ROSA

TAMAULIPAS.- Hoy hace tres años ganó la presidencia de la República ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR, una victoria contundente, histórica y esperanzadora, al día siguiente fuera de protocolo y de facto comenzó a gobernar gracias a que ENRIQUE PEÑA NIETO se hizo a un lado, la Cuarta Transformación había comenzado, tres años después todo es pretexto, resultados negativos y división.

Así es mis queridos boes, fueron más de 30 millones de votos, más que nadie, el pueblo estaba harto del estancamiento, de la corrupción, de la pobreza, de la desigualdad y AMLO representaba entonces el cambio de régimen.

Era el momento de primero los pobres, del crecimiento económico, de la pacificación del país, del fin de la corrupción, del sistema de salud como el de Suiza, de la educación de calidad en todos los niveles, del fin de los gasolinazos, de que bajaran los recibos de luz, de los guaruras, de la vida hostentosa de los presidentes, de terminar con el gobierno rico y el pueblo pobre.

Tres años después la realidad de México es muy diferente a la promesa de LÓPEZ OBRADOR, por desgracia muy, pero muy diferente.

El México en paz de la 4T era en realidad un México bañado en sangre, más que con ENRIQUE PEÑA NIETO, pero mucho, mucho más que en el Calderonato, el México de AMLO en el que los 87 mil 852 muertos por la violencia en 25 meses, casi triplican los 34 mil 651 del mismo periodo de FELIPE CALDERÓN.

Si, se oía bonita, hasta romántica la frase que resumía la estrategia para pacificar México: Abrazos no Balazos, pero las bandas del crimen organizado se rieron de AMLO, aprovecharon su ‘inocencia’ y hoy dominan entre el 35 y el 40 por ciento del territorio nacional “Ha adoptado básicamente una actitud de dejar hacer ante los cárteles, lo cual es obviamente problemático para nuestro gobierno.

Es un gran problema para México… Dejó ir a Ovidio Guzmán porque no quería tener un derramamiento de sangre más generalizado en Culiacán. Fue simplemente un momento terrible.

La verdad es que el Ejército mexicano fue superado en armas”. Son las palabras de Christopher Landau, hasta hace unos meses embajador de Estados Unidos en México, en ellas sin querer hace un diagnóstico completo de la estrategia de Abrazos no Balazos, que tres años después de que ganó AMLO la presidencia, ya puede ‘presumir’ que entregó el territorio a los malos.

Además de las ejecuciones, AMLO carga en su registro un aumento del 47 por ciento en el delito de trata en lo que va de este año, respecto al anterior, 30 por ciento más violaciones y 7 por ciento en feminicidio… 25 meses de sangre.

Primero los pobres fue otra de las frases que convencieron a esos 30 millones que le dieron el voto: no más al México del PRI y PAN, que era catalogado una fábrica de menesterosos, de clientela política, de borregada. Hoy tres años después las cuentas ahí también son desastrosas; en el México de la 4T los pobres más pobres no solo no bajaron en número, se duplicaron; porque de acuerdo con el Instituto de Investigaciones para el Desarrollo con Equidad (Equide) de la Universidad Iberoamericana, México pasó de tener 9.3 millones de personas en pobreza extrema a 18.3.

Hoy en el ‘paraíso’ que vendía AMLO para el México de la Cuarta Transformación, con más pobres que nunca, su gobierno ha tenido que reconocer, apenas ayer y antier, otro de sus grandes fracasos: el sistema de salud.

Y es que no solo no hemos igualado a Suiza o los países nórdicos con hospitales equipados y atención de primera, sino que con todo y sus problemas era mucho más eficiente el Seguro Popular, el IMSS y el ISSSTE del viejo régimen.

Hoy la falta de medicamentos es la constante, las protestas por la falta de ellos y de muchos insumos hospitalarios son el pan de cada día y algunos funcionarios de la cúpula de la 4T prefieren llamar golpistas a los que se quejan en lugar de solucionar los problemas.

El sistema de salud de la 4T es el de la falta de todo, el que pronosticaba 6 mil muertos por el Covid y ayer ya iban 233 mil, el que prometía vacunas para todos a mediados del 2021 y para ayer apenas 25 millones teníamos por lo menos una dosis.

No, nada de esto oiremos hoy en el informe de AMLO, en el que seguro describirá el México que solo existe en su mente obnubilada por el poder; ese que a los tontos vuelve locos, dicho por el propio LÓPEZ OBRADOR. Obvio que no dirá que la gasolina no ha aumentado, aunque en diciembre del 2018 costaba 18 pesos la magna y hoy en buena parte del país supera los 22 pesos.

No dirá que la energía eléctrica ha subido, pero miles de jefes de familia tienen otros datos, no que el dólar de 19 pesos en el 2018 hoy en promedio en casas de cambio no baja de los 21.

En lo personal no diré que estoy decepcionado de AMLO, porque crecí en Tamaulipas donde hasta el más tonto sabe que la inseguridad no se combate con abrazos, donde la gente de bien sabe que si quiere ganar dinero hay que trabajar.

Eso si, lamento y mucho los miles de muertos que su dejar hacer a los malos ha ocasionado por todo Tamaulipas, por todo el país y lamentó más la muerte de miles a causa de una pandemia mal enfrentada, que se ha llevado a amigos y familiares.

En fin, tres años de un triunfo que se convirtió en derrota y muerte para miles de mexicanos, tres años que el que prometía terminar con el gobierno rico y pueblo pobre, lo festejará dentro de las paredes del Palacio Nacional; una joya arquitectónica donde ni los más frívolos del viejo régimen se atrevieron a vivir.

CONFESIONARIO / MELITÓN GARCÍA DE LA ROSA

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