En la casilla contigua 1 básica, ubicada en la Escuela Secundaria General Número 1 “Benito Juárez García”, de la Zona Centro de Altamira, el presidente municipal electo Armando Martínez Manríquez votó en la consulta popular.
El alcalde electo llegó a muy temprana hora con la finalidad de emitir su voto y cumplir con su deber cívico, siendo un hecho histórico en México este mecanismo de participación ciudadana.
“Quisimos llegar temprano para votar de inmediato y así cumplir con el deber cívico; es un evento histórico la consulta ciudadana donde entra la democracia participativa de todos los ciudadanos. Es un deber ciudadano la consulta popular y venimos prácticamente a abrir la mesa receptora, pues la idea es enviar mensaje a todos los ciudadanos para que participen. Vénganse a participar donde les corresponde de las ciento once mesas receptoras que tenemos en el municipio”, expresó Martínez Manríquez.
Ese ejercicio cívico -aseguró- al dar como respuesta SI o No, es un parteaguas en el país, porque los ciudadanos son considerados para llevar a cabo un juicio contra los ex presidentes de México.
“Será un parteaguas porque entra la democracia directa de los ciudadanos; nos va a permitir que todas las acciones del gobierno sean autorizadas, avaladas y aprobadas por los ciudadanos”, añadió.
Dijo confiar en las decisiones de los ciudadanos, pero sobre todo, que el Instituto Nacional Electoral (INE) sabrá llevar a cabo una elección transparente.
Señaló que el Gobierno Municipal de la Cuarta Transformación, que inicia el 1 de octubre, es integrado por los mismos ciudadanos, iniciando por quienes forman parte del cabildo electo.
En ese sentido, Martínez Manríquez recordó que las “mañaneras” de su administración serán de 6 a 7 de la mañana para dar a conocer la agenda pública de la semana, conformándose también por las opiniones de la ciudadanía puesto que las obras que se ejercerán serán las que beneficien directamente a la población.
El alcalde electo fue acompañado a sufragar por su esposa Rosa Irma Luque de Martínez, y sus hijos Armando y Rosita Martínez Luque.
Por Silvia Mejía