TAMAULIPAS.- El crecimiento económico es una medida o indicador que registra el cambio en la producción de bienes y servicios que se realizan en el país, por lo que su comportamiento resulta fundamental para conocer qué tanto el país ha mejorado en términos del empleo, salarios y riqueza.
El registro de esta producción se conoce como Producto Interno Bruto (PIB). Para mejorar el bienestar de la población, una condición fundamental es elevar la producción de un periodo a otro, es decir, que se tenga un crecimiento económico.
Actualmente, el valor de la economía mexicana en términos de lo que produce equivale a 16.6 billones de pesos en términos reales, comparado con lo que se producía antes de la pandemia que equivalía a 18 billones de pesos; es claro observar que aún queda por recuperar la producción en alrededor de 1.4 billones de pesos.
La mayoría de lo que se produce en el país son servicios, equivalen alrededor de 11 billones de pesos. En segundo lugar se ubica la producción industrial que equivale a 5.1 billones de pesos y la producción agrícola y ganadera alrededor de 577 mil millones de pesos.
Durante la pandemia, el sector económico que fue más afectado en términos de producción fue el industrial, su producción disminuyó en 24 por ciento. En segundo lugar se ubicó al sector servicios con una caída en su producción de 14 por ciento; mientras que en el sector primario sus efectos fueron mucho menores.
Sin embargo, aun cuando el sector terciario o de servicios es el más grande con respecto al tamaño de la producción en el país, es importante señalar que no es el sector que más efecto tiene sobre la tasa de crecimiento del país, por varias razones, la principal, es que el valor agregado que genera a través de las cadenas de valor es bajo, además, los participantes en las cadenas de producción son reducidos.
Por el contrario, el sector industrial es el que mayor contribución presenta en el crecimiento económico, esto se debe a que el valor agregado que se adiciona a los productos intermedios y finales es mayor y además son varios los participantes en las cadenas productivas.
Dentro de las actividades industriales se pueden clasificar por aquellas que son intensivas en mano y las que son intensivas en capital, el impulsar la inversión de estas últimas desde el punto de vista de la productividad e innovación resulta más atractivo para acelerar el crecimiento económico en las regiones en el país.
Es decir, este tipo de empresas demandan trabajo más especializado con niveles de salarios superiores a la media nacional, además, producen artículos intermedios y finales que demandan una considerable cantidad de insumos por lo que requieren una red de proveedores especializado, de tal manera que generan impactos en los trabajadores y en las empresas locales y regionales.
En México se identifican cinco industrias claves para impulsar el crecimiento y el desarrollo del país: la industria química; industria metálica; la industria de maquinaria y equipo; industria eléctrica; industria de la electrónica; y la más importante es la industria del transporte.
Las ciudades que han desarrollado este tipo de industrias presentan indicadores de crecimiento destacados, sin embargo, es necesario planear el desarrollo de este tipo de industrias con el propósito de que los efectos positivos que se generen puedan verse reflejados en mayoría de la población. Usted ¿Qué piensa?
REFLEXIONES EN ECONOMÍA / JORGE ALBERTO PÉREZ CRUZ
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— Expreso (@ExpresoPress) January 5, 2021
