En los Estados Unidos, una maestra contagiada con COVID-19 se quitó el cubrebocas durante una clase y terminó por infectar a más de la mitad de sus alumnos.
Lo anterior fue detallado por Rochelle Walensky, directora de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EU (CDC), quien contó el caso ocurrido en mayo pasado en una escuela primaria del condado de Marin, en California.
“La introducción del virus en el aula por parte de una maestra que trabajaba en la escuela, mientras era sintomática y no estaba vacunada, y que se quitó la mascarilla al leer en voz alta a una clase, dio lugar a casos dentro del aula, en toda la escuela y entre las familias de los estudiantes y el personal de la comunidad”, explicó.
La maestra, quien no estaba vacunada contra el COVID-19, acudió a la escuela pese a tener síntomas leves de coronavirus, sin embargo pensó que tenía alergia, no que estaba infectada.
La docente se quitó el cubrebocas para leer un texto a sus alumnos, lo que terminó por infectar a 12 de 24 estudiantes.
Al final, terminaron por infectarse un total de 27 de personas por COVID-19, incluida la maestra. Todos tuvieron síntomas leves y lograron recuperarse tras su periodo de cuarentena.
“La escuela exigía a los profesores y a los alumnos que utilizaran mascarillas mientras estuvieran en el interior; las entrevistas con los padres de los alumnos infectados sugirieron que el cumplimiento de las directrices de uso de mascarillas y distanciamiento por parte de los alumnos, de acuerdo con las recomendaciones de los CDC, era alto en la clase. Sin embargo, se informó que la maestra se quitaba la mascarilla en ocasiones cuando leía en voz alta en clase”, apuntó el informe del CDC.
“A lo largo de este periodo, todos los pupitres estaban separados por dos metros. Todas las aulas tenían filtros de aire de partículas de alta eficiencia portátiles y las puertas y ventanas permanecieron abiertas”, agregó.