En las entrevistas previas, en el templete, en la conferencia de prensa posterior al evento, los asistentes más importantes al informe del senador Américo Villarreal, y el propio legislador, lo repitieron como un mantra: la unidad es fundamental en el proceso electoral que está por encarar Morena.
Como se esperaba, buena parte de los protagonistas de la llamada cuarta transformación en Tamaulipas se dieron cita ayer en el auditorio del ICEST.
Acudieron personajes que no necesariamente podrían considerarse afines entre sí, y convivieron en relativa armonía.
Estuvieron, por ejemplo, Mario Delgado y Ricardo Monreal, que coincidieron en el discurso aunque, es evidente, avanzan por carriles separados al interior del morenismo.
El presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado, que se describe a sí mismo como un político “independiente”, no se quedó en el mismo hotel que el resto de los “VIP” que llegaron de diferentes entidades.
Pero en más de una ocasión, Monreal y Delgado encontraron espacios para platicar a solas. Saben que a estas alturas del partido se necesitan mutuamente y ninguno de los dos puede dinamitar puentes que en algún momento, pudieran significar la única manera de llegar a tierra firme.
El primero en apelar a la unidad fue el anfitrión.
El mensaje político de Américo Villarreal giró en torno a ese concepto: “Desde Morena, estoy seguro, lograremos un proyecto de unidad y el interés de las y los tamaulipecos prevalecerá”.
Luego Monreal no sólo pidió disciplina a los morenistas de Tamaulipas, sino que mandó varios mensajes -no tan cifrados-
a ediles y diputados tamaulipecos que, asegura, coquetean constantemente con otras fuerzas políticas.
Mario Delgado insistió, como si él mismo estuviera haciendo un esfuerzo por creerse sus palabras, en que el partido saldrá unido del proceso interno que, por lo menos en este momento, parece todo menos terso si se considera la gran cantidad de tiradores que aspiran a la candidatura, y la intensidad del fuego amigo que se ha desatado en las últimas semanas.
Más allá de sus buenos deseos, el dirigente nacional reveló algunos detalles sobre lo que viene para su partido:
1) En noviembre se aplicarán las encuestas, incluida una “preliminar” que servirá para eliminar a la paja, y concentrarse solo en los aspirantes más serios, y con posibilidades reales de competir.
2) La alianza con el Partido Verde Ecologista es una prioridad para su partido. Más allá de las circunstancias locales,
la línea nacional es ir juntos por la seis gubernaturas del 2022.
Y si unidad fue la palabra más mentada ayer, valdría la pena revisar qué hicieron ayer los demás aspirantes de Morena.
Estuvieron presentes José Ramón Gómez Leal, Adrián Oseguera y Erasmo González.
Y de los que no acudieron, Rodolfo González Valderrama fue el único que usó sus redes sociales para felicitar a Américo.
No pasó desapercibido el extraño caso del alcalde de Matamoros, que programó exactamente a la misma hora del informe, una entrevista colectiva para anunciar que él también buscará la candidatura.
Hablando de unidad, el gesto de Mario López fue anotado por la dirigencia nacional.
POR MIGUEL DOMÍNGUEZ FLORES




