CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- Hace millones de años, el municipio de Victoria fue mar y hoy día en su sierra se han encontrado cientos de fósiles marinos en gran parte de la capital de Tamaulipas.
Y es que el geólogo Othon Báez Banda, expone que la prueba fehaciente de que en Victoria hubo mar, son todos estos restos prehistóricos a los que llaman “amonitas”.
Báez Banda, acompañado del doctor Marggid Rodríguez Avendaño, quien fue participe en el estudio que se efectuó desde hace casi cuatro meses en las serranías de la capital, señaló que en efecto Victoria alguna vez fue mar.
Y es que después del impacto del meteorito que cayó en la península de Yucatán hace 66 millones de años, las placas tectonicas de la tierra se reacomodaron, dando paso a la creación de sierras y montañas, entre ellas la Madre Oriental.
“Después del impacto del meteorito, hubo reacomodo y una transformación en las placas tectónicas, por lo que el mar que aquí había (Victoria) escurrió hasta lo que hoy es Madero y Soto la Marina, todo eso”.
“La sierra se levantó y dejó muchas especies fosilisadas que hoy encontramos aquí en Victoria, tanto en el caños de la peregrina, el del novillo y lo que es la carretera Rumbo Nuevo”, expuso Rodríguez Avendaño.
Por su parte Báez Banda explicó se han encontrado más de 300 fósiles tan solo en estos tres lugares, pero la mayoría han sido descubiertos después de la creación de la Rumbo Nuevo.
Y es que con el corte de cerros que se efectuó para la obra inaugurada en el gobierno estatal de Tomás Yarrington, se pudo hacer más fácil el encontrar este tipo de piezas de la prehistoria, puesto que quedaron expuestas las capas de tierra que esconden estos vestigios.
POR Antonio H. Mandujano