Si eres de las personas que presenta altos niveles de colesterol que, en caso de no regular dichos niveles, se está en riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares.
De acuerdo con los Instituto Nacional de la Salud, se indica que el colesterol “es una sustancia cerosa y parecida a la grasa que se encuentra en todas las células de su cuerpo […] El cuerpo necesita algo de colesterol para funcionar bien. Pero si tiene demasiado colesterol en la sangre, tiene un mayor riesgo de enfermedad arterial coronaria”.
Cuando se hace la prueba una prueba para conocer los niveles de colesterol, se mide el colesterol de lipoproteína de baja densidad (LDL, por su sigla en inglés) y el colesterol de lipoproteína de alta densidad (HDL, por su sigla en inglés).
En el primer caso, es el que se conoce como colesterol malo y es el que se acumula en las arterías y en consecuencia, las obstruye. Para las personas mayores de 20 años el nivel óptimo, se indica en el mismo portal, es de menos de 100 mg/dL (miligramos por decilitro).
Por lo que se explica en el porta Mayo Clinic que cuando se registra el colesterol alto es posible que se formen “depósitos grasos en los vasos sanguíneos. Con el tiempo, estos depósitos crecen y hacen que sea más difícil que fluya suficiente sangre a través de las arterias”.
Por lo que los depósitos pueden romperse de repente y/o formar un coágulo que puede ser la causa de un infarto o accidente cerebrovascular.
El que una persona registre altos niveles de colesterol puede ser consecuencia de una vida poco saludable, puede ser una causa hereditaria, pero se puede prevenir o reducir los riesgos, y una de las recomendaciones es cambiar los hábitos alimenticios.
Entre los alimentos que puede ser un aliado es el consumo de avena y a continuación te presentamos dos opciones.
Agua de avena
- 1 taza de avena (150 gramos)
- 2 litros de agua
- 1 ramita de canela.
Preparación: Licúa la avena, agua y canela por 10 minutos. Cuando todos los ingredientes estén perfectamente mezclados, vierte la preparación en una jarra y enfría por media hora. Consume esta agua a lo largo del día durante una semana.
Avena y manzana verde
- 1 taza de avena
- 1 manzana verde
- 1 vaso de agua
- 1 cucharada de canela en polvo
Preparación: Lava la avena y en una olla ponla a cocer por 10 minutos; cuando adquiera una consistencia espesa retira del fuego; posteriormente incorpora la manzana (en trozos) y espolvorea canela. Lo recomendable es que la persona lo desayune por dos semanas.
Batido de avena y frutas
- 2 tazas de agua
- 1 o 2 manzanas de tu preferencia
- 3 cucharadas de avena
- 2 cucharadas de jugo de limón
Remoja las hojuelas de avena por unas horas con la bebida vegetal, después lava las manzanas y corta en trozos pequeños. Vierte todo en la licuadora junto con el jugo limón y procesa hasta lograr un batido espeso, si quieres endulzar, agrega canela y miel.