El cuidado de los ojos es de suma importancia, por lo que los médicos y científicos siguen investigando las formas en la que se puede disminuir el riesgo a perder la visión. Ahora, gracias a estudios recientes se puede saber que no solo la exposición al sol, la televisión y computadoras hacen daño, pero ahora también se confirmó que algunos hábitos alimenticios pueden perjudicar la visión de las personas.
De acuerdo con datos de la Organización Mundial de la Salud existen al menos 2 mil 200 millones de personas que padecen deficiencia visual, donde cerca de la mitad pudo haberse evitado con algunos cambios en la forma de vivir. Esto toma relevancia cuando se dice que en las próximas décadas esto puede a seguir incrementando considerablemente.
Ahora bien, el cuidado no solo tiene que ver con el tiempo que se pasa frente a una computadora, tablet, televisión o celular, sino que también se debe tener cuidado en la alimentación, ya que estudios recientes confirmaron que algunos alimentos y hábitos pueden perjudicar los ojos.
Los productos
Los expertos de la clínica Baviera confirmaron que lo mejor es tener una dieta balanceada para tener un mejor cuidado de los ojos, siendo los productos procesados los primeros que se tienen que eliminar en la alimentación de la gente.
Entre la comida que se tiene que quitar o disminuir su consumo considerablemente se trata de la famosa “comida chatarra”, ya que aportan calorías vacías y dañinas para el organismo. Hablando de los ojos la afectación sería debido al alto nivel de ingesta de grasas saturadas y azúcares en exceso.
Es importante que además de comer saludable hacerlo de una manera pausada, es decir, no hacerlo con prisas o rápido, ya que se tiene que hacer una buena digestión, ya que esta puede ayudar a reducir el estrés.
Un punto importante en la alimentación también es el eliminar o recudir las bebidas alcohólicas, ya que cuenta con calorías vacías, es decir que no aportan nada bueno al cuerpo, pero por el contrario si daña el organismo.
Otro detalle que se revela es que se recomienda que la gente tenga horarios de comida preestablecidos y no saltarse las comidas o cambiar el horario, ya que el cuerpo se prepara mejor para recibir los alimentos cuando se tiene un sistema establecido.