SONORA.- Agentes de la Policía Municipal atendieron el reporte de una mujer que falleció por intoxicación, quien de acuerdo con sus familiares, había consumido un veneno de rana que le suministraron presuntos “chamanes” como parte de un ritual de retiro espiritual con ‘medicina ancestral’, en Nogales, Sonora.
A las 8:46 de la noche del sábado, oficiales de la policía municipal acudieron al camino del Paseo Mascareñas, a la altura de una empresa gasera donde reportaban a una persona intoxicada.
Al llegar al lugar encontraron a socorristas de la Cruz Roja Mexicana que brindaban los primeros auxilios una mujer que se encontraba tendida sobre el suelo y que lamentablemente ya no presentaba signos vitales.
En el lugar se entrevistaron con el esposo de la fallecida, quien narró que momentos antes había dejado a su esposa en compañía de su madre y hermana en el Autozone que se encuentra en camino a Cananea, ya que se dirigirían a un rancho que está en el camino a Mascareñas a realizar una terapia, siendo que al regresar por su esposa la encontró inconsciente por lo que decidió trasladarla en su vehículo particular hasta donde se encontró con la ambulancia.
En el lugar también se encontraban dos personas quienes dijeron llamarse Juan Pablo de 41 años y Juan Diego de 30, quienes manifestaron ser chamanes de medicina ancestral y que la persona fallecida de nombre Perla de 31 años, estaba participando en un ritual de desintoxicación junto con 6 personas más, donde le suministraron veneno extraído de la rana del Perú.
La sustancia que secreta la Phyllomedusa bicolor, también conocida como rana kambó o rana mono grande, es utilizada por el anfibio para defenderse de los depredadores.
Esta rana, de un brillante color verde, vive principalmente en la selva del estado de Acre, en el noreste de Brasil y también en otros países amazónicos, como Bolivia, Colombia, Guyana, Perú y Venezuela.
CON INFORMACIÓN DE EXCÉLSIOR