TAMAULIPAS.- La construcción del aeropuerto “Felipe Ángeles” significa uno de los golpes más severos para la reacción corrupta, inmoral y antipatriota. Los conservadores suponían que en la 4T no existía capacidad para realizar una obra de tal magnitud y sin embargo, ésta fue entregada al pueblo mexica conforme a lo programado y con un ahorro de 120 mil millones de pesos, respecto del fallido proyecto de Texcoco.
En “la mañanera” de este lunes AMLO se mostró feliz, feliz, sabedor de que a sus adversarios se les acaban los argumentos para atacarlo, y es que el AIFA fue uno de los objetivos prioritarios de su gobierno y con mayor razón, si para alcanzarlo hubo de vencer incontables obstáculos considerando que los neo porfiristas y sus aliados extranjeros, perdieron otro de sus faraónicos negocios inmobiliarios.
Ahora el supremo gobierno va por la conclusión de la refinería “Dos Bocas” y desde luego del Tren Maya que con el AIFA conforman la trilogía mediante la cual ha de activarse el desarrollo, principalmente el sureste olvidado y discriminado por los regímenes neoliberales. Sin duda la república será diferente cuando AMLO haya cumplido su misión en el 2024. Y si no, pa´l baile vamos.
Mientras tanto, llega al proceso de Revocación de Mandato fuerte, sea con el pronóstico mayoritario a su favor, ante el enojo de los saqueadores que no encuentran forma de contener el proyecto transformador de mayor relevancia desde la revolución maderista. Ellos, los conservadores, sobredimensionan diferencias hacia el interior del gabinete (normales en cualquier democracia); intervienen en la privacidad de la familia presidencial inventando tonterías que caen por su propio peso, señalan contratos que suponen irregulares, o distribuyen espectaculares contra la permanencia de AMLO en la presidencia, pero todo les sale mal debido a que su doble moral reaccionaria está bajo sospecha.
Ya le digo, los argumentos acaban para los saqueadores: el Covid por ejemplo, está casi erradicado y la mejor muestra es que ahora mismo todo el país está en verde. Sea que la campaña sucia contra las autoridades de Salud dejó de tener efecto, en tanto se aceleran los esfuerzos para alcanzar el autoabastecimiento de combustibles en el menor tiempo posible. De ahí la importancia de la refinería “Dos Bocas” y la adquirida en los Estados Unidos.
El gobierno de la 4T no se detiene, al contrario, multiplica sus tareas a partir de la justicia social y participación ciudadana en las decisiones de mayor impacto. La consulta sobre Revocación de Mandato es un proceso de alto sentido democrático mediante el cual se rescata el poder original: El pueblo pone y el pueblo quita, en oposición a los grupos que durante treinta y seis años se convirtieron en monarquías.
El asunto es que para desgracia de los saqueadores, el aeropuerto “Felipe Ángeles” ya funciona como uno de los más modernos del mundo-mundial. Y ni modo que sea invento.
TODO, MENOS VIOLENCIA
Tamaulipas vive un ambiente de polarización política debido a circunstancias de sobra conocidas que hacen inocultable esta inédita situación en la historia moderna del estado. Es un escenario enrarecido dentro del cual habrán de registrarse importantes hechos que no sabemos si serán de beneficio o perjuicio para las mayorías.
Desde luego que lo más destacado es la elección de gobernador donde se manifiestan dos tendencias claramente definidas; en una prevalece tolerancia y prudencia, en tanto que la contraria parece alimentada de provocaciones y oratoria costumbrista de fácil digestión pero nulos efectos, tanto, que no modifica significativamente el pronóstico inicial.
En este sentido el columnista insiste en que el voto ya está definido, creemos sin embargo que la campaña de una de las partes será de estridencia extrema por la sencilla razón de que, desde ahora, navega a contracorriente en un mar de pasiones políticas con diferencias de origen que son del dominio público.
A los tamaulipecos nos falta mucho por ver de aquí al día de la elección…esperemos que sea para bien.
SUCEDE QUE
Alejandro Rojas Díaz-Durán es de los que dicen: “¡pa’ que me invitan si ya saben cómo me pongo!”.
Y hasta la próxima.