NUEVO LEÓN.- El plan Monterrey del agua para Nuevo León que difundió el gobernador del vecino estado, Samuel García, quien pretende llevar agua de Tamaulipas será un fracaso; ya que no existe agua suficiente ni para atender la demanda de la población del estado, alertó Raúl Quiroga Álvarez, ex funcionario federal y estatal, experto en el tema hidrológico.
“Ni la Presa Vicente Guerrero, ni realizar la segunda línea del acueducto de la presa el Cuchillo a Monterrey, es factible, ya que solo provocaría pobreza al acabar la agricultura del Distrito 026 que la integran los municipios de la frontera chica”.
La única opción favorable para ellos, es construir un acueducto para llevar el agua desde el Pánuco, hasta la urbe regia, por lo que deben concentrarse en atender ese proyecto que resolvería el problema del agua por más de 50 años.
Dijo que el último estudio oficial realizado por la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), revela que la Presa Vicente Guerrero, no tiene disponibilidad para dar ni una gota más de agua para el consumo humano.
“La presa no tiene capacidad para otorgar nuevas concesiones para la extracción, ni para riego agrícola, ganadero o de uso urbano, ya que los estudios arrojan que los afluentes que surten de líquido a la presa no tienen la capacidad para aumentar su nivel”.
Actualmente esa región está sobre explotada por lo que existe déficit importante de agua.
“Desde hace 8 años el nivel de la presa Vicente Guerrero va hacia abajo y no ha logrado recuperarse, por lo que es muy descabellada la propuesta de intentar llevar agua desde ese lugar, hasta Monterrey, ya que no tiene capacidad para entregar ni un metro cúbico al vecino estado donde necesitan un mínimo de 5 metros cúbicos para solucionar el agua”.
La Presa no tiene agua, ni para Victoria
El también ex director de Unidades de Riego en Tamaulipas y ex funcionario de la CONAGUA, dijo que la vida útil de la presa para cubrir la demanda de agua en Ciudad Victoria, concluyó desde el 2010.
“Esa etapa ya terminó y desde entonces, estamos sufriendo cada año por falta de la segunda línea del acueducto y quiero agregar que Victoria es la única localidad de todo el país que tiene disponibilidad y accesibilidad del agua a muy poca distancia”, dijo Quiroga Álvarez.
Hace ocho años él mismo ayudó a negociar con agricultores del Distrito 086, para que otorgarán agua para la capital del estado, garantizando el líquido para la segunda línea del acueducto para Victoria.
“No creo que los productores agrícolas de esa región quieran otorgar agua al estado de Nuevo León, para que se la lleven a Monterrey”, dijo.
Actualmente la presa Vicente Guerrero tiene un nivel del 23 por ciento, con un almacenamiento de 928 millones de metros cúbicos, que es uno de sus niveles más bajos de la última década.
Construir segunda línea del Cuchillo acabaría la frontera
El experto Quiroga Álvarez, advierte que llevar agua de la Presa el Cuchillo, afectaría a Tamaulipas ya que acabaría con la economía de la frontera chica donde se ubica la región del Distrito de Riego 026.
Tiene más de 40 años estudiando las cuencas hidroagrícolas donde la cuenca del río San Juan, está agotado y no tiene capacidad de dotar de más agua a la zona, por lo que la presa no tiene la capacidad para atender la demanda que requiere la ciudad de Monterrey, por lo que el agua se la acabarían en un periodo de seis años.
“La construcción de una segunda línea de la presa el Cuchillo a Monterrey, es inviable porque solo tendría capacidad para bombear 3 metros cúbicos de agua por segundo, cuando la ciudad requiere de 5 metros”, explicó.
Esta obra dejaría sin agua a la presa Marte R. Gómez, de la cual dependen productores agrícolas de municipios como Camargo, Mier, Miguel Alemán, Díaz Ordaz, una parte de Reynosa y Río Bravo.
Además el proyecto de construcción de la segunda línea del acueducto no se puede realizar, debido a que el gobierno de Nuevo León, no cumplió con los 10 compromisos firmados desde el año de 1996.
Entre los compromisos incumplidos destaca la construcción de un emisor de aguas tratadas de Monterrey a la Presa Marte R. Gómez, el cual nunca se construyó.
Otro es la construcción de una presa de almacenamiento, la cual no se hizo y solo se construyó una derivadora que no da ni un metro cúbico de agua para riego, ya que está siempre seca.
Tampoco se realizó la depuración de usuarios de riego de la cuenca del río San Juan, donde existen miles de tomas ilegales que extraen agua que no llega a la presa, entre otros puntos que sería la defensa que tendrían los productores del Distrito 026 para oponerse a la construcción de la segunda línea del acueducto del Cuchillo.
Por Antonio de la Cruz
EXPRESO-LA RAZON