RUSIA.- Informes clasificados de Estados Unidos afirmarían que Vladimir Putin sí está muy enfermo -con cáncer avanzado- y que en abril se habría sometido a un tratamiento para combatirlo, sin embargo, éste no sería suficiente y muchos temen que el final del presidente de Rusia “está cerca”, revelaron tres fuentes de distintas agencias de inteligencia.
La revista Newsweek difundió tres entrevistas exclusivas con un agente de la oficina del Director de Inteligencia Nacional (DNI), un oficial superior retirado de la Fuerza Aérea (USAF) y uno más de la Agencia de Inteligencia de la Defensa (DIA), quienes habrían tenido acceso a dichos documentos secretos en los que hay una evaluación de la gestión de Putin en los últimos meses.
Los tres agentes de inteligencia coincidieron en que la supuesta mala salud del presidente de Rusia estaba mermando la toma de decisiones respecto de la invasión en Ucrania, pues cada vez estaría más “paranoico sobre su control de poder”, el cual a 100 días de iniciada la guerra, “aún es fuerte pero ya no absoluto”.
“Las maniobras dentro del Kremlin nunca han sido más intensas durante su gobierno, todo el mundo siente que el final está cerca”, aseguró el integrante de la DNI.
Asimismo, los altos funcionarios del gobierno estadounidense detallaron que a su país se le ha complicado un poco evaluar con precisión la salud del presidente de Rusia debido a que ha estado más aislado que antes. Todo esto ha dado pie a que los dimes y diretes sobre supuestas enfermedades graves aumenten conforme pasan los días. De igual forma, los tres certificaron que a inicios de la guerra, hubo un atentado en contra del mandatario ruso, del cual salió ileso.
Los rumores sobre la mala salud de Putin
Pero vale recordar que la salud de Vladimir Putin no es un tema de reciente conversación, sino que ésta se remonta a 2020, cuando el diario británico The Sun publicó que el líder del Kremlin, quien hoy tiene 69 años, padecería una enfermedad neurodegenerativa y desde entonces se especula que padece Parkinson y demencia.
Luego, llegó la invasión a Ucrania y con ella comenzaron los rumores sobre otros padecimientos, como el cáncer, sobre todo derivado de las declaraciones del politólogo y sociólogo ruso Valery Solovey, quien tras afirmar que había escondido a su familia en un búnker en Altai ante la posibilidad de una guerra nuclear, también reveló que el presidente había recibido “un diagnóstico fatal”.
Desde entonces, se ha dicho que Putin tendría cáncer de estómago, de tiroides y hasta en la sangre, según filtraciones de oligarcas y hasta fuentes cercas al Kremlin, el cual se ha encargado de negar dichos rumores.
Putin is hailing Russia's "liberation" of Mariupol after his forces completely destroyed during a two-month siege.
He told defense minister Sergei Shoigu to block off the Azovstal metallurgical plant, where the last Ukrainian troops are holed up, "so that a fly can't get in." pic.twitter.com/g2lNd44qXF
— max seddon (@maxseddon) April 21, 2022
A Vladimir Putin se le ha visto recientemente con comportamientos extraños, los cuales van desde temblores involuntarios, el rostro hinchado y una dispersión que encendió las alarmas durante las celebraciones de Pascua y durante una reunión con su ministro de Defensa, pues por ratos se le miraba confundido, desesperado y aferrándose a una mesa.
A mediados de mayo, el canal de Telegram General SVR -administrado por un supuesto ex oficial del Servicio de Inteligencia Exterior de Rusia que se identifica como Viktor Mikhailovich- reveló que el jefe del Kremlin habría sido operado del estómago como consecuencia del cáncer que supuestamente padece, pero que además tenía pendiente otra cirugía pospuesta desde abril y a la que en cualquier momento debería someterse porque su enfermedad estaría muy avanzada.
No es momento de celebrar (aún): EU
Sin embargo, el gobierno de Estados Unidos no debe confiarse ni echar las campanas al vuelo, coincidieron los tres expertos en inteligencia, pues ya tienen el antecedente de Osama Bin Laden y Saddam Hussein, pues en su momento los informes clasificados sobre la salud de ambos formaron parte fundamental de la estrategia para eliminarlos hace un par de décadas y al final, ésta fue duramente cuestionada.
“Sin embargo, aseguran que en el caso de Vladimir Putin si es prácticamente un hecho que si tiene problemas de salud, “pero no debemos dejar de esperar su muerte para impulsar acciones proactivas de nuestra parte. Un vacío de poder después de Putin podría ser muy peligroso para el mundo”, agregó el alto líder la Fuerza Aérea de Estados Unidos.
Mucho se ha dicho que el Kremlin ya estaría preparando el relevo de Vladimir Putin en el poder, pues estaría pronto a dejar el cargo. El hombre que lo sucedería sería su amigo cercano Nikolai Patrushev, jefe del Consejo de Seguridad de la Policía Federal de Rusia, a quien conoce desde que eran agentes de la extinta KGB (Comité para la Seguridad del Estado, en español) y al que consideran incluso “más despiadado que el propio Putin”.
CON INFORMACIÓN DE EL HERALDO DE MÉXICO