ESTADOS UNIDOS.- La masacre en Uvalde, Texas, sigue dando información al cabo de los días. En esta ocasión salió a la luz un reporte de lo sucedido con Pete Arredondo, el Jefe de Policía de Uvalde que tenía a cargo la seguridad de esa entidad durante el ataque que Salvador Ramos perpetró contra los niños de la Robb Elementary School.
En el reporte preliminar, se ha dado a conocer que Arredondo arribó al sitio sin radio, además de que lo primero que indicó fue “retroceder” y no confrontar a Ramos.
Pete Arredondo llega a la escena
El día que Salvador Ramos ingresó al colegio donde asesinó a 21 personas, uno de los primeros en llegar al lugar para apoyar a las víctimas fue Pete Arredondo, toda vez que el asesino tenía consigo un rifle de asalto estilo AR-15. Para mala fortuna del uniformado y su equipo, la comunicación fue mala en todo momento.
Y es que todo se agravó cuando se supo que Arredondo no traía consigo una radio, por lo cual no estuvo al tanto de inmediato de las llamadas al 911 que hicieron algunos niños desde dentro del Robb Elementary School.
No someten a Ramos
La información indica que dos oficiales fueron rozados por las balas mientras perseguían a Ramos, por lo cual Arredondo hizo la llamada para retroceder y llamar a un negociador porque pensó que el pistolero estaba “contenido”, según informó el Times.
Ese movimiento contradice los protocolos de tiradores activos que dicen que los policías deben avanzar sobre un pistolero lo antes posible. Por lo tanto, Arredondo usó un teléfono celular para llamar a un teléfono fijo de la policía y así solicitar una radio y respaldo, diciendo:
“Necesitamos más potencia de fuego y necesitamos rodear el edificio”, se dijo.
Para rematar este punto, el negociador no pudo comunicarse con Ramos por teléfono, dijo el alcalde Don McLaughlin en una entrevista el miércoles con Telemundo San Antonio y el Washington Post.
Arredondo y la policía local enfrentan críticas por su respuesta al tiroteo, que dejó 19 niños y dos maestros muertos. Se cuestiona si se podrían haber salvado vidas si la policía hubiera actuado antes para matar a Ramos y atender a los heridos.
Caos, niños clamando ayuda y la muerte de Ramos
Al paso de los días se revelan detalles del tiroteo. Se sabe que Arredondo ordenó a los policías no rompieran la puerta, incluso cuando los niños aterrorizados que estaban encerrados con el pistolero llamaron al 911 pidiendo ayuda.
“No quiero morir”, dijo Khloie Torres, de 10 años, a un despachador en una llamada, diciendo que había “muchos cuerpos” dentro de su salón de clases, dijo el Times.
“Mi maestra está muerta, mi maestra está muerta, por favor envíen ayuda, envíen ayuda para mi maestra, le dispararon pero sigue viva”, dijo, según el informe sobre la llamada 40 minutos después de iniciado el tiroteo.
La maestra Irma García ya había sido herida y trató de cerrar la puerta para contener a Ramos, quien siguió disparando contra otros niños.
Ramos ingresó a la escuela poco después de las 11:30 a. m., pero no recibió un disparo mortal hasta las 12:50 p. m. cuando una unidad táctica desobedeció las órdenes y abrió la puerta del salón de clases con la llave de un conserje. Los oficiales de la unidad se reunieron en el pasillo fuera del salón de clases, donde encontraron la cadena de mando en ruinas.
Finalmente, el grupo avanzó hacia el salón de clases ante el no de sus superiores.
CON INFORMACIÓN DE EL HERALDO DE MÉXICO