La polarización política en México obliga a nuevas realidades, sobre todo el cuidado y protección de organismos descentralizados “autónomos”, en servicio de la población.
Desde el púlpito mañanero se sabe de las negras y fieras intenciones de exterminar al Instituto Nacional Electoral. El INE a través de su presidente y consejeros ha sido lo más sólido ante la 4T.
El Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), es otra piedra en el zapato para la política pública y clientelar del obradorismo; por eso mismo la intención de desaparecerlos.
Bajo el amparo de una propuesta de reforma administrativa el Gobierno de México, pretende apañarse las funciones de los organismos autónomos y regresarlos a la dictadura, perdón, al Estado Mexicano, argumentando que gastan mucho dinero, miles de millones de pesos sin ser realmente funcionales a los ciudadanos, sino a grupos de interés político.
Para beneficio de México, en Tamaulipas comenzaron a profesionalizar, pero sobre todo a blindar uno de los organismos descentralizados más codiciados por los grupos de poder político empresariales, me refiero a la Comisión Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (COMAPA) Zona Conurbada.
Adelantado a las cosas, el gobernador panista Francisco Javier García Cabeza de Vaca, envió al Congreso de Tamaulipas la iniciativa para reformar la Ley de Aguas del estado y elevar al por mayor la figura del gerente general, alejando esta silla de cualquier ambición personal o cuota política.
El cambio legislativo sugiere que el nombramiento de un nuevo gerente general tenga la aprobación de la mayoría calificada del Congreso del Estado, es decir, no dependerá de ningún grupúsculo político con ganas de usar la COMAPA como trampolín en busca de la presidencia municipal de Tampico y/o Ciudad Madero; mucho menos, podrá ser regido el organismo descentralizado por nadie que tenga como uno propósito servir y hacerlo bien, en otras palabras, se acabó la COMAPA como trampolín o puerta de acceso a un cargo de elección popular.
El blindaje no fue para Jorge Federico Rivera Schotte, ex gerente general de la COMAPA como lo ven con su corta y diminuta visión algunos tamaulipecos. Rivera cumplió con la encomienda dictada, pero eso sí, el proyecto legislativo fue en beneficio y protección del mejoramiento y funcionamiento óptimo de la COMAPA y los usuarios.
Aunque nos cueste decirlo y/o creerlo con esto se acabó el botín político en el que habían convertido por los siglos de los siglos a la COMAPA
En la intimidad…Por cierto Gabriel Guerra Turrubiates fue ratificado por el Congreso de Tamaulipas y bendecido por el Consejo como nuevo gerente general de la COMAPA.
Ahora tiene un nuevo compromiso 24/7 los 365 días del año, esa es la visión
Por David Ed Castellanos Terán
@dect1608