Aunque no se considera aún crisis migratoria, la situación que se vive en Matamoros realmente lo es: más de 5 mil personas de diferentes países aparecen en las listas que organizaciones civiles tienen para quienes quieren cruzar la frontera bajo el título 42 y empezar sus trámites de asilo.
Las cifras son inciertas pues no hay un censo oficial de los migrantes, una parte mínima está en la Casa Migrante San Juan Diego mientras que en las avenidas Tamaulipas y De las Rosas, cercanas al Puente Nuevo Internacional, unos 600 duermen literalmente en la calle o en casas abandonadas que adoptaron como sus viviendas.
Pocos son los que logran llegar al Centro Integrador del Migrante pues al iniciar la llegada de más personas el responsable del mismo se cerró a admitir más huéspedes.
La situación de quienes llegaron desde octubre a esta fecha a esta frontera se agrava porque en las últimas semanas los frentes fríos que se registran en la región han sido severos, lluvias y bajas temperaturas son soportados con pocos abrigos y sin techo.
Ante esta situación el Municipio dispuso la apertura de la alberca Chavez como un refugio temporal para las personas en situación de calle que también aceptó a familias migrantes que permanecen en el lugar.
De igual forma la semana pasada se reunieron diversas autoridades con la finalidad de resolver el problema de los migrantes en las calles.
En la reunión Sedena, Policía Estatal, Guardia Nacional y el Secretario del Ayuntamiento entre otras autoridades definieron buscar un sitio donde se les pueda dar albergue, alimentos y seguridad.
Por ahora el mayor temor de los migrantes es que hay noticias que el Título 42 concluirá el 21 de diciembre por lo que no quedarán opciones para un cruce seguro.
LLEGAN MILES DE VENEZOLANOS
Apenas llevaba unas horas el anuncio de la Administración del Presidente Joe Biden de un acuerdo con México para expulsar a territorio mexicano a todos los migrantes venezolanos que crucen ilegalmente hacia Estados Unidos cuando el 13 de octubre a la frontera de Matamoros llegó el primer grupo de deportados.
“ O sea los venezolanos nos dividieron a todos para poder hacer esto, fuimos el primer grupo de deportación, el primer grupo éramos como 150 o 200, pero nosotros tenemos hasta siete días de un centro de detención a otro”, precisó uno de los primeros migrantes venezolanos expulsados.
Las acciones migratorias forman parte de un esfuerzo por contener el incremento de migración irregular venezolana que en 2022 alcanzaban más de 153 mil, los primeros deportados por la frontera tamaulipeca aseguran que fueron engañados.
“Nos engañaron diciendo que íbamos para migración y cuando llegamos no nos dijeron nada, solamente caminen, caminen, caminen, caminen, y no nos dijeron absolutamente nada, a nosotros, quien nos dijo que estábamos en México fue una señora que venía en la misma cola”.
“Nos preguntó: ¿que ustedes hacen cola para poder entrar? y la misma señora aclaró que esto era México y ahí fue cuando caímos en cuenta del engaño”. A partir de esta fecha Estados Unidos deporta migrantes venezolanos por la frontera mexicana para que inicien trámites según el nuevo programa, para que ingresen por vía aérea, donde uno de los requisitos más importantes es que tengan quien los reciba en ese país y se haga cargo de sus gastos.
LA MIGRACIÓN VENEZOLANA
Cruzar la selva y ríos peligrosos según las palabras de los migrantes son solo algunas de las dificultades a las que se tuvieron que enfrentar los miles de migrantes venezolanos que quieren llegar a Estados Unidos.
Niños, jóvenes e incluso mujeres embarazadas cruzaron siete países para llegar a México su último paso para lograr su sueño, aunque para algunos como Jenderson y Kirley el camino ha sido una pesadilla.
Esta pareja salió de Venezuela hace casi 4 meses y hace dos dias llegaron a lo que será su último punto en México antes de cruzar a los Estados Unidos su destino soñado, pero en su camino se encontraron con la peor pesadilla al viajar en La Bestia según cuenta Jenderson “Nosotros entramos por Torreón y fuimos de Torreón a Monterrey en el tren, en “la bestia”, nos tuvimos que lanzar por el techo hacia el monte porque unas personas armadas se subieron y se llevaron demasiada gente, niños pequeños y pude ver a un niño pequeño que se le mocho el brazo“, comenta.
Según el joven venezolano lo peor de su viaje fue el paso por México, peor incluso que su travesía por la selva.
“Uno no sabe ni quiénes son, ni quien es ni nada, nos decían que estábamos en su tierra que teníamos que darles cosas de valores todo y nosotros preferimos correr salir por el techo de la bestia porque no sabíamos quienes eran pero nos iban a llevar como se llevaron a mucha gente, uno de ellos quería 5 mil dólares por dejarnos ir pero lo que hicimos fue escapar”, indicó.
La más afectada por la huida en el tren fue Kirley quien al saltar del techo resultó con heridas en la cabeza que gracias a un buen samaritano le fueron atendidas en la Cruz Roja de Torreón.
“Un señor en Torreón me hizo el favor me llevó la Cruz Roja, obvio me vio desangrando horrible y me llevó pues sabes, me ayudó y eso te lo juro es algo que obvio me hizo arrepentirme de haberme venido”, relata.
A ella le hicieron una radiografía, su herida más grave estaba en la cabeza y en la sien, además de algunos golpes en diferentes partes de su cuerpo.
La jovencita y su novio ya están integrados a la comunidad migrante que espera en la avenida Tamaulipas para ser inscrita en la lista que tienen las asociaciones para que los abogados que hacen los trámites los puedan ingresar bajo el título 42, pero enfrentan un nuevo problema, no tienen documentos pues todos los perdieron en la mochila que dejaron a las personas que subieron a la Bestia.
Y LOS HAITIANOS TAMBIEN SON MILES
A la par de los venezolanos cientos de migrantes haitianos comenzaron a llegar a la frontera de Matamoros tras su paso por otras ciudades por donde intentaron ingresar a los Estados Unidos bajo el asilo político sin éxito.
“Están aquí por muchos meses, elestán aquí para pedir asilo, muchos de ellos estaban en otra parte de México o la frontera, como no se puede cruzar vinieron para acá, muchos saben que otras familias han pasado por acá y tratan de llegar a los Estados Unidos”, explicó Gretry Bousseau, un migrante haitiano que hacia las veces de traductor en las agrupaciones los apoyan sus trámites ante abogados de migración.
“Hay muchos durmiendo en la calle, como no aceptan a los compañeros haitianas en los albergues entonces muchos de ellos están en la calle esperando para poder ingresar más rápido a los Estados Unidos”, explica.
DEFINEN LUGAR PARA ALBERGUE
Aunque no hay un censo oficial del número de migrantes que están en Matamoros hay quienes dicen que son alrededor de cinco mil repartidas en las calles, casas abandonadas, departamentos en renta y hoteles.
La Casa Migrante tiene menos de 400, mientras que en el Centro Integrador no se conoce la cifra exacta pues no hay datos oficiales, y la alberca Chavez tiene un promedio de 250. De hecho alrededor de la Casa Migrante se quedaban decenas de migrantes que padecieron las lluvias y fríos de hace unas semanas, pero al suspenderse los registros para que abogados especialistas en temas de migración abandonaron el área y fueron a calles cercanas al puente internacional. Ante esa situación las autoridades municipales en Matamoros trabajan en la búsqueda de soluciones para la problemática migrante.
Carlos Ballesteros, secretario del Ayuntamiento explicó que apenas la semana pasada visitaron el albergue de la alberca Chávez con los representantes de Estados Unidos en Matamoros para tomar nota y ver qué apoyo podrán brindar las organizaciones internacionales.
Manifestó que se buscaron varias opciones para albergar a los cientos de migrantes que lleganma esta frontera, una de ellas el Centro Integrador para el Migrante, pero ante la falta de respuesta de los responsables del lugar se buscan otras opciones.
“ Una de ellas es el complejo de seguridad pública que hizo en la administración de Alfonso Sánchez en la Portes Gil, ya estamos limpiando, ya nada más me fauna reunión con migración para ir al complejo y con las autoridades encargadas de la seguridad”, mencionó. En ese lugar podría haber más de 1000 gentes porque el complejo tiene el edificio y un estacionamiento muy grande donde se puede armar un campamento.
POR ROSY PEREDA RANGEL