La bancada de Morena, en la que de facto está incluido GUSTAVO CÁRDENAS y la panista MIREYA GONZÁLEZ, ayer fue desarticulada la súper Fiscalía General de Justicia de Tamaulipas.
Así es mis queridos boes, con la decisión de ayer el bloque de Morena reintegra al Poder Ejecutivo; es decir al mando del gobernador AMÉRICO VILLARREAL ANAYA, el control de los C4, C5, el Grupo de Operaciones Especiales y la Unidad de Inteligencia Financiera y Económica del Estado.
¿Es bueno o malo para los tamaulipecos de a pie?, no lo sé, pero el hecho de la desarticulación de la Fiscalía y el empoderamiento táctico y de operación policiaca de élite del GOPES que obtiene el Ejecutivo a través de la Secretaría de Seguridad Pública le deja al gobierno morenista toda la responsabilidad de disminuir la violencia en Tamaulipas.
No es un secreto que eran los GOPES los que en el sexenio panista de FRANCISCO JAVIER GARCÍA CABEZA DE VACA, los que encabezaron los principales golpes a la delincuencia en el Estado.
Tampoco lo es, que el manejo de los sistemas de monitoreo de miles de cámaras distribuidas a lo largo y ancho de Tamaulipas combinado con la operación policiaca de los GOPES dieron como resultado que la Entidad dejara los primeros lugares de violencia y transitará hacia los estados más seguros.
El gobierno anterior y sus diputados decidieron que para asegurar que Tamaulipas siguiera por el mismo rumbo de contención de la violencia, los GOPES, los C4, C5 y la UIFE pasaran a formar parte fe la FISCALÍA, su mayoría aprobó las modificaciones y así se tránsito los primeros casi tres meses de la administración morenista.
La decisión de los panistas fue una maniobra legal, para eso es el Congreso local, para modificar leyes y la modificación de ayer que devuelve el control al Ejecutivo es igual de legal, para eso juntaron los votos suficientes.
El festejo de los morenistas que ayer desarticularon la súper Fiscalía, los lamentos de los panistas que ayer cuestionaron la modificación, para los ciudadanos de a pie, como usted y como yo debe ser lo menos importante.
Para los de a pie, para los que no traemos camionetas blindadas, para los que no tenemos un séquito de guaruras, para los que no vivimos en un palacio o una fortaleza impenetrable, lo que importa es poder vivir en paz.
Para los tamaulipecos que ya vivimos días de terror en los sexenios de EUGENIO HERNÁNDEZ FLORES y EGIDIO TORRE CANTÚ y que fuimos testigos los pasos agigantados que se dieron en el de CABEZA DE VACA lo mínimo que tenemos que mantener, es la exigencia de que se mantengan los niveles de seguridad que se lograron en el pasado reciente.
A ‘Juan Pueblo’ lo que menos le interesa es quien dirija a los GOPES, quien esté al frente de las miles de cámaras de videovigilancia o quien esté al frente de la UIFE.
Reitero, lo que nos interesa es que quienes lo hagan, no solo mantengan los avances en materia de seguridad, sino que mejoren.
Eso si, todos tenemos que entender que ahora los instrumentos para las batallas contra la delincuencia las tiene el gobierno morenista y que es ahí donde debemos depositar nuestra exigencia de que la guerra contra los malos se gane para beneficio de los buenos.
Y es ahí donde los que no compartimos el fanatismo hacia ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR tememos que su estrategia de abrazos y no balazos pueda trasladarse hacia Tamaulipas.
Los resultados a nivel federal ya los conocemos, aumento alarmante de homicidios dolosos, 142 mil en lo que va del sexenio, contra 120 mil en todo el sexenio de FELIPE CALDERÓN, aumento de feminicidios, extorsiones y vastas regiones del país ‘gobernadas’ por los grupos fácticos.
Nadie en su sano juicio quiere eso para Tamaulipas, por eso tenemos que exigir que la votación de los morenos de ayer en el Congreso local sea para bien y no solo haya servido para tomar venganza de los panistas que los primeros meses de la legislatura les arrebataron la mayoría obtenida en las urnas.
POR MELITÓN GARCÍA DE LA ROSA