- 20 mil hectáreas de sorgo sembradas en Altamira
- 3,500 pesos de inversión por hectárea
- El sorgo es muy resistente y muy noble para producir, con cuidado menores que las demás siembras, pero depende mucho de la humedad y en la región se depende mucho de las lluvias temporales.
- Una de las posibles ventajas del sorgo es que es menos la inversión, aunque recientemente se han enfrentado a la aparición de nuevas plagas, que, si no son atendidas, pueden afectar severamente
Es un cultivo que depende de la humedad.
El sorgo tiene muchos usos, pero el principal es para alimento del ganado.
Altamira, se ha convertido en uno de los principales productores de sorgo en Tamaulipas y es que se trata de un cultivo más barato en comparación a otros.
En la actualidad fueron sembradas un promedio de 20 mil hectáreas, correspondientes al ciclo otoño invierno.
“Dependemos mucho del factor clima, es como nos rinde la producción. El sorgo es en otoño invierno en la región, en otras partes lo siembran en otros ciclos diferentes al nuestro”, comentó el productor, Enrique Báez Nieto.
Considera que una de las posibles ventajas del sorgo es que es menos la inversión, aunque recientemente se han enfrentado a la aparición de nuevas plagas, que, si no son atendidas, pueden afectar severamente.
“En estos tiempos han aparecido muchas enfermedades que desconocemos, en otras partes del mundo existían, pero aquí no las teníamos como el caso del pulgón amarillo, cogollero que últimamente le ha pegado mucho al sorgo y eso genera que aumenten los costos”, refirió.
El sorgo es muy resistente y muy noble para producir, con cuidado menores que las demás siembras, pero depende mucho de la humedad y en la región se depende mucho de las lluvias temporales.
“Tenemos bastante superficie sembrada, me atrevo a decir que hay entre 15 a 20 mil hectáreas sembradas en la zona”.
La inversión en una hectárea de sorgo se calcula en 3,500 pesos aproximadamente, mientras que en hortalizas es mucho mayor, no cualquier productor del sector social se atreve a sembrarlas.
En cuestión de hectáreas son mínimas las que son de hortalizas, por lo regular son sembradas por productores que tienen sistema de riego o muy buenas fuentes de agua como el río Tamesí o el sistema lagunario.
“Es mucha la diferencia en sembrar granos con hortalizas. Andamos oscilando en unos 3,500 pesos, en lo que se refiere a las hortalizas es una inversión muy fuerte que no cualquiera se atreve hacerlo, estos son cultivos que tienen un cuidado muy especial de muchas aplicaciones, de insecticidas que son bastantes caros, fertilizantes especiales para tener buenas ganancias”.
¿Para qué se utiliza el sorgo?
Enrique Báez Nieto, explica que el sorgo tiene muchos usos, pero el principal es para alimento del ganado.
Afirmó que en muchas partes se utiliza para la tortilla, dicen que es mejor calidad que la del maíz y “aquí se quiso implementar y hubo talleres para la preparación del sorgo y la probamos, efectivamente está mejor que la del maíz, pero no se pudo por el arraigo que se tiene”.
“Nos manejamos mucho por los precios internacionales como es también la soya, el sorgo tiene muchos usos, pero principalmente es alimento para el ganado”.
Agregó que los cambios climáticos han venido a trastornar lo que son los ciclos agrícolas, antes se tenían muy bien definidos, los productores sabían cuándo empezaba el ciclo primavera verano y el de otoño invierno.
“Hoy desafortunadamente nos llueve al inicio de un ciclo de manera considerable, se detiene y ya no vuelve a llover y se ha ido modificando mucho los tiempos de siembra”.
En el caso de los granos -dijo- se tienen bien identificado cuáles son las compras que están establecidas para que una vez que se recolecte la producción, sin ningún problema la entreguen.
La sequía que ha predominado en los últimos años en la región también ha sido un factor para que la gente deje las tierras y se dedique a otras actividades.
Óscar Figueroa/Expreso-La Razón