La elección extraordinaria que dio como como ganador al morenista, José Ramón Gómez Leal, resultó un pincelazo de lo que veremos en la contienda del 2024 en Tamaulipas. El PAN y sus aliados -PRI y PRD- seguirán en su trayectoria descendente al tiempo de poner en la ruta de la extinción, tanto a tricolores como al sol azteca.
El tricolor, no puede frenar su caída; los amarillos, ya no tienen espacio para caer más: están en el fondo de los fondos.
En buena parte de los 43 municipios tamaulipecos, el institucional, obtuvo menos del 3 por ciento de la votación; eso los pone en el umbral de la desaparición legal -acreditación- ante los órganos electorales y desplazado de las prerrogativas, que en mucho son dinero constante y sonante.
Los otrora izquierdistas del sol azteca, andan peor: oscilan sus cosechas de sufragios en menos del 2 por ciento.
Ni siquiera los independientes, han caído tan bajo.
Ambos partidos en declinación, son víctimas de sus propios errores de estrategia: del centro izquierda -PRI- se movió a la derecha decadente; y de la izquierda, los perredistas, dieron una maroma para caer en lo más pernicioso de la derecha mexicana.
La decoloración, está afectando a ambos.
Esa frustrante coalición, no sumó fanáticos; lo que evidentemente incorporó, fueron los negativos de los coaligados.
El 2024, será peor el escenario para el PRIAN y corifeos.
Tamaulipas, ya tomó partido.
Y no es, ni el PAN, ni el PRI, ni el PRD y menos el MC.
Otro elemento, que operará como lastre para el bloque opositor al lopezobradorismo en la región, es Genaro García Luna.
Deja en la orfandad, este ex Secretario de Estado, al grupo más sólido del PAN tamaulipeco: el cabecismo. Francisco García Cabeza de Vaca, orbitó ya por oportunismo, ya por estrategia, en los meridianos políticos de quien ahora se sabe, era socio del Chapo Guzmán.
La prensa nacional, incluso, ha manejado informaciones que aseguran reuniones entre Cabeza de Vaca, gente del hoy preso y el narco sinaloense.
El sofocón de MORENA al panismo representado por el ex gobernador azul, es otro indicativo del desplome de una de las bandas panistas más nefastas en la historia política de ese partido en la entidad.
(Se dio el lujo, hasta de exportar a su cuñado JR a MORENA, para iniciar la degradación del metabolismo interno guindo)
Bajo esas circunstancias, los guindos van solos para el 2024 en la comarca.
Ni el PAN, ni el PRI, ni el PRD, están en posibilidades de re-articularse para hacer un papel digno y competitivo el próximo año.
AMLO, seguirá siendo el factor dominante en el estado.
Por muy mal gobierno que se tenga.
A pesar de los dirigentes lopezobradoristas, de bajo perfil y más baja moral.
Aún en contra, de la multiplicación de las partes pútridas que se han sumado, y se siguen sumando, a MORENA en todo el estado.
Igual que ahora: López Obrador, continuará como exitoso coordinador de campaña de los candidatos tamaulipecos.
Se reeditará la historia: candidatos chafas, campañas menores, y partido indigente, con un líder -AMLO- que los hará ganar sin despeinarse.
Como en los cocteles de camarón: con uno que salga bueno…
Por José Ángel Solorio Martínez