Hace años conocimos la historia de un joven que hacía algo más que las peores travesuras, se trataba de acciones delincuenciales.
Desde pequeños robos domiciliarios, golpizas a jóvenes débiles y lastimar mascotas, al grado de matar un pequeño cotorro cabeza amarilla propiedad de una vecina en venganza por darle una queja a sus padres.
Era alguien que parecía normal, pero que nunca recibió una llamada de atención severa de sus padres, siempre lo protegieron, nunca lo atendieron, apenas si se atrevían a regañarlo, los actos de disciplina eran diferentes en los 70 y 80 y el más duro que le dieron fue pegarle suavemente en las manos con una vara de nardo.
La terapia de la chancla nunca se aplicó, jamás fue puesto en cintura, con el tiempo sus pequeños delitos crecieron, convirtiéndose en robos y abusos, que terminaron en un asesinato.
Dio muerte a una mujer, una dama respetada en la sociedad capitalina, delito por el cual todavía paga.
Claro, no todos los delincuentes juveniles terminan como asesinos, otros terminan como gobernador, pero sí no reciben la atención requerida su esencia no cambia, solamente la disfrazan, cometen abusos inimaginables que por desgracia no se castigan y gozan de impunidad.
Hoy, algunas de las autoridades responsables de castigar los delitos simplemente no proceden en contra de aquellos de los delincuentes. Es como la madre de aquel asesino.
Hasta cierto punto, consideramos que tienen razón, pues no vemos de ninguna manera al Auditor Superior del Estado, JORGE ESPINO ASCANIO investigando a los ex alcaldes que fueron sus compañeros, sus amigos, ni tampoco proceder contra gerentes o titulares de los organismos paraestatales.
Es el mismo caso del Fiscal Anticorrupción, RAÚL RAMÍREZ no procederá contra los ex secretarios por más pruebas que presenten en su contra, así exista una confesión que se robaron poquito “apenas unos cuantos clips” como justificó el saqueo de la Unidad de Inteligencia Financiera.
Lo mismo podemos decir del Fiscal General de Justicia, IRVING BARRIOS, al que francamente no lo vemos proceder en contra de ninguno de aquellos que fueron sus compañeros de gabinete.
Y que pensar del Supremo Tribunal de Justicia, en manos de un personaje que fue uno de los asistentes personales del ex gobernador FRANCISCO JAVIER GARCÍA CABEZA DE VACA y sus ex funcionarios más cercanos que controlan los jueces que en el pasado emitieron ordenes de aprehensión contra connotados morenistas.
En los últimos días se corre la versión de que ahora sí van con todo contra los saqueadores de Tamaulipas, que por lo pronto lograran se proceda penalmente contra dos ex miembros del gabinete.
Es un clamor general, prometen ahora si castigar a dos ex Secretarios, entre ellos una mujer, por el saqueo millonario que hicieron en Tamaulipas.
El mayor saqueo detectado es en la Secretaria de Salud, con la chiapaneca GLORIA MOLINA y en Obras Públicas, CECY DEL ALTO. Eran dependencias controladas por los hermanos CABEZA DE VACA, como son ISMAEL y JOSÉ MANUEL.
Sin embargo, existe una obsesión contra la priísta YAHLEEL ABDALÁ CARMONA, quien ocupó la Secretaria de Bienestar Social en la última etapa de la anterior administración.
Pero, todo son puros buenos deseos, las llamadas de atención son como las que hacía la vecina de para uno de sus hijos que termino en delincuente por la falta de disciplina.
La administración y procuración de justicia son una herramienta comprometida con el pasado.
En serio no todos terminan igual.
Bueno, por hoy es todo.
Adiós y aguas con los patinazos…
POR JUAN ANTONIO MONTOYA BÁEZ
Contacto:
patinadero@hotmail.com