Ejidatarios buscan recuperar los terrenos de la unidad deportiva de Altamira, al asegurar que fueron despojados de ellos en el gobierno de Eugenio Hernández Flores.
El representante legal de los 186 ejidatarios del Ejido Altamira, Ismael Torres Fernández detalló que en la actualidad hay un juicio agrario, en el que está demandado el Instituto Tamaulipeco de Vivienda y Urbanismo (ITAVU), así como el ayuntamiento y otras áreas de gobierno.
«Queremos que esté terreno reingrese al patrimonio del ejido, la escritura la celebraron en el 2013 y el juicio lo interpusimos en el 2017. Los dueños son los ejidatarios del Ejido Altamira, lo hicieron de manera ventajosa, pero no realizaron bien el acto jurídico».
La unidad deportiva colinda con el Bulevar PRIMEX y la zona dorada comercial, los terrenos fueron entregados en comodato al ayuntamiento en 1991, es decir el propietario es el Ejido Villa de Altamira.
«Estamos celebrando una inspección judicial, se trata de un juicio agrario que se está desarrollando en el Juzgados Agrarios de Tampico, en el cual el ejido Altamira está demandando al Instituto Tamaulipeco Vivienda y Urbanismo que depende del Gobierno del Estado, al ayuntamiento y otras dependencias la nulidad parcial de una escritura de propiedad que se disputó en un proyecto de lotificación que inició el gobierno del estado de Eugenio Hernández Flores».
En la administración de Armando López Flores, quisieron dar por terminado el comodato, pero les comunicaron que debían demandar la nulidad de la escritura.
Sobre el uso que le darían a los terrenos de la Unidad Deportiva en caso de recuperarlos, será a través de una asamblea como los ejidatarios tomen una decisión, una vez que se dicte la sentencia decidirán qué hacer.
El área en donde está la Unidad Deportiva son casi 46 mil metros, «inclusive hicieron un irrisorio pago de 246 mil pesos sobre está área, pagaron seis pesos el metro cuadrado de la superficie».
Tiene confianza en que el ejido ganará el asunto legal, «tenemos buenas expectativas, confiamos en la justicia agraria, confiamos en el magistrado y en los tribunales federales».
«El terreno sigue escriturado a nombre del ITAVU y con el juicio agrario queremos anular la situación y se reintegre al ejido. En 1991 se dió en comodato al municipio, lo puede usar el ayuntamiento y no está en duda, de hecho no se opone».
Óscar Figueroa/La Razón




