El derecho a la salud está consignado en el artículo 4 Constitucional, sin embargo, para la mayoría de los mexicanos, ni las condiciones de salud ni el acceso al servicio está garantizado.
Las instituciones públicas de salud a nivel nacional (IMSS e ISSSTE), no han escapado del escándalo por el sobrecosto con el que adquieren algunos medicamentos, negocios realizados en lo “oscurito” con compras millonarias a proveedores “favoritos”, medicamentos que se caducan en bodegas, entre otras irregularidades.
Y en Tamaulipas no ha sido la excepción.
El IMSS cuenta con una afiliación superior a los 83.2 millones de derechohabientes a nivel nacional, mientras que el ISSSTE registra poco más de 13.5 millones de derechohabiencia.
La opacidad de las compras que hace el gobierno federal, al dejar de publicar los detalles de las mismas, ha dificultado acceder a muchos datos, pero no a todos, por lo que algunos escándalos se han dado a conocer.
De agosto del 2020 a abril del 2023 el ISSSTE, reportó pérdidas anuales que promediaban los 102 millones de pesos en 301 claves médicas, según respondió el Instituto a una solicitud de transparencia.
En un reportaje publicado por el Hub de Periodismo de Investigación de la Frontera Norte, el ISSSTE no especificó cuántas unidades o piezas de medicamentos correspondían por cada clave, sin embargo se conoció que entre estos se encontraban vacunas contra la difteria, tos ferina, tétanos, hepatitis B, poliomielitis e Influenza tipo B.
Mientras que el IMSS proporcionó datos confusos, y solo señaló que en 2022 solicitó el remplazo del medicamento caducado en las 32 delegaciones estatales y 12 hospitales de especialidades del Instituto, con una pérdida de 177.4 millones de pesos.
Los principales medicamentos que han caducado en las bodegas del IMSS son para tratamientos de cáncer, VIH, padecimientos cardiacos, diabetes, asma, tiroides, meningitis, esclerosis múltiple, alergias, vacunas de diferentes tipos, entre otros.
La salud se ha convertido en un negocio lucrativo para unos cuantos y en todos los estados hay casos de corrupción que han sido expuestos, relacionados a compras de medicamentos para distintas afecciones y enfermedades.
Entre 2008 a 2018, de acuerdo a una investigación del Proyecto sobre Organización, Desarrollo, Educación, e Investigación (PODER), el IMSS solo invirtió 36 de cada 1,000 pesos para adquirir el tratamiento que salvaría miles de vidas, en la mayoría mujeres afectadas por el cáncer de mama, a pesar de que algunos hombres ha sido detectados también con esta afección.
El IMSS pasó de un monto global de 27,378,515.47 pesos en 2013 para medicamentos contra el cáncer a 3,315,922,927.91 pesos en 2016; es decir, pasó del 6.6 al 1.2 por ciento de su presupuesto para adquirir las medicinas para este tratamiento.
Al revisar 4,897 contratos de compras, en la mitad de ellos se reportó un sobrecosto, destacando en el reportaje el caso de la delegación Tamaulipas que pagó a la empresa “Farmacias Tamaulipecas, S.A. de C.V., en una compra emergente, letrozol en grajeas a más de 5,000 pesos cada caja, cuando el precio de referencia era de 250 pesos. Esto representó un sobrecosto de 7,844.73 por ciento que significó pagar 19,000 pesos más a la empresa en la que Francisco Javier Herrera Quintero aparece como representante legal de la compañía que no aparece en el registro de la Propiedad Pública y del Comercio en Línea.
En ese mismo periodo, Farmacias Tamaulipecas recibió 1,047 contratos del IMSS por 6,602,435.13 pesos de los que el 92 por ciento fueron bajo la modalidad de compra emergente.
Las cinco entidades que en el país más gastaron en tratamiento para el cáncer de mama, fueron Ciudad de México, Veracruz, Chihuahua, Jalisco y Tamaulipas, explicando que tras la toma de posesión de Andrés Manuel López Obrador, el portal de compras del IMSS se encuentra sin actualizar, lo que dificultó la rendición de cuentas.
En otro caso, de nueva cuenta Farmacias Tamaulipecas reporta un sobrecosto en la venta de medicamentos al IMSS, esa vez de metilfenidato de 10 mg, indicada para autismo y trastornopor déficit de atención con hiperactividad (TDAH).
Entre 2008 y 2018 el Instituto hizo 952 compras de ese medicamento por más de 238 millones de pesos, de las que en 612 de las compras se hicieron con sobreprecio por más de 3 millones de pesos.
En el caso de la delegación de Tamaulipas, hizo la compra a esa empresa (Farmacias Tamaulipecas) que reportó un sobrecosto de 1,110.14 por ciento.
Mientras que de las proveedoreas actuales, Logística Médica de Occidente, también vendió a Tamaulipas, como a otras 10 entidades, el medicamento con sobrecosto de entre 792.13 a 202.04 por ciento, según lo reportado en Compras IMSS.
MEDICAMENTOS ONCOLÓGICOS Y CONTROLADOS, ENTRE LOS MÁS ROBADOS
Otra forma de corrupción detectada en el Instituto Mexicano del Seguro Social, ha sido el robo de medicamentos y otros insumos en los hospitales y clínicas en Tamaulipas, como el puesto al descubierto a principios del 2015.
El periódico Expreso publicó que el robo estimado en 7.9 millones de pesos se registró en febrero de ese año en la farmacia del Hospital General número 6 del IMSS en Tampico.
Los delincuentes habrían roto las cadenas que aseguraban una de las puertas principales y sustrajeron fármacos costosos, la mayoría de ellos para tratamientos oncológicos.
En esa fecha se señaló que no sería el primer robo de ese tipo que afectaba a dicha clínica, pues un año antes, la misma farmacia fue saqueada con medicamentos con valor de 1,200,000 pesos.
La entonces Procuraduría General de la República (PGR) fue la encargada de interar la denuncia y realizar las investigaciones, en las que además se agregó robos recurrentes en el hospital de Ciudad Madero.
Entre los objetos hurtados se contabilizó en esos tiempos, un monitos de electrocardiograma de 40 mil pesos, dos proyectores, una computadora portatil y hasta víveres de la cocina, señalando a algunos trabajadores como los responsables o cómplices de dichos hurtos. El 27 de octubre del 2022 en el almacén del IMSS en Victoria, reportó el robo de medicamentos, principalmente para el tratamiento del cáncer y el VIH valuados en 4 millones de pesos.
El almacén, ubicado en el residencial Campestre, tenía las puertas abiertas, según reportaton empleados, quienes al llegar por la mañana, detectaron que los anaqueles del cuarto frío hacían falta esos medicamentos, sin embargo las 24 horas del día, as instalaciones contaban con guardias de seguridad.
Esta misma instalación fue robada en 2009 en dos ocasiones, por sujetos encapuchados y armados que por la noche someterían al personal de guardia para posteriormente sustraer medicamentos oncológicos y controlados, valuados en 7 millones de pesos en cada uno de los robos sucedidos con tres meses de diferencia.
Entre 2013 y 2019, Tamaulipas se ubicó en el segundo lugar con más robos de medicamentos y equipo médico con 12.8 millones de pesos, solo después de Coahuila con 24.4 millones de pesos en ese mismo periodo.
NEGOCIOS TURBIOS
En 2020 la entonces recién nombrada delegada regional del IMSS Tamaulipas, Velia Patricia “S” y otros dos funcionarios, fueron denunciados penalmente ante la Fiscalía General de la República (FGR) por presuntas irregularidades en los procesos de licitación, descalificaciones arbitrarias y adjudicaciones directas.
La denuncia interpuesta por la empresa Toners y Tinta Express del Norte, S.A. de C.V., donde se denuncia además de la delegada, al Jefe de Servicios Administrativos, y el encargado de Control de Abasto. Carlos Alberto Serna Chapa, representante legal de la empresa, en las licitaciones donde participaba Toners y Tinta Express del Norte, pese a cumplir con todos los requisitos y contar con una propuesta técnica adecuada, se les descalificó de forma tendenciosa.
Sobre esto, el Órgano de Operación Administrativa Desconcentrada Regional del Instituto, afirmó que los procedimientos de la licitación se realizron en apego a la Ley de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios del sector público y su reglamento.
En 2021 un funcionario del IMSS en Tamaulipas fue denunciado ante la Fiscalía General de la República (FGR) por presunta corrupción, luego que mismos trabajadores del Hospital General 11 en Nuevo Laredo, lo señalaron de que por medio de amenazas, exigía que todos los medicamentos que se requerían se hicieran con la empresa Capace Medical S.A. de C.V. son pasar por una licitación.
De acuerdo con lo señalado por el entonces director del hospital, Alejandro Soto, el Subdirector administrativo, Mario Steve Rocha y el jefe del departamento de abasto, Víctor Alejandro Osorio, quienes luego de la denuncia fueron destituidos, el titular del área de prestaciones médica en la delegación, Javier “M”, los amenazaba de no seguir las órdenes para favorecer a la citada empresa.
Este caso se dio a conocer luego que se filtraron audios donde se escucha a Javier “M” en forma prepotente ordenar las compras con la citada empresa Capace Medical, y de no acatar la indicación, amenaza con destituirlos.
Sobre el caso, el IMSS Tamaulipas emitió un boletín donde negó los hechos y señaló que actuaría e investigaría a quien participó y filtró el audio, sin mencionar en ningún párrafo al funcionario señalado, mientras unos días después, los denunciantes fueron cesados.
El más reciente escándalo fue puesto a la luz por el periodista Dario Celis, quien señaló una trama de negocios entre empresarios y funcionarios del IMSS para asegurar contratos millonarios a través de adjudicaciones directas. Señala a las empresas Ethomedical, Arnold & Jelga y Distribuidora Sagitario de Aldo “D” y Comercializadora Adelfa, Grupo Actipro, Grupo Osherx y PCB Empresarial Monterrey de José Manuel Ballar, han obtenido grandes beneficios por estas transacciones.
Mientras que por parte del IMSS, señala al Coordinador de Control de Abasto, Jorge de Anda, y el Coordinador Técnico de Administración del Gasto, Daniel Ramírez, quienes habrían simulado la necesidad de insumos a nivel nacional, donde no están incluidos los oncológicos.
De acuerdo con el periodista, algunas delegaciones registran un aumento de compras de hasta 15,700 por ciento; señalando que las empresas de ambos capitalistas, se relacionarían con Federico “M”, hijo del delegado del IMSS en Tamaulipas, Federico Héctor Marín Martínez, obteniendo más de 2,000 millones de pesos a través de contratos por asignación directa, en entidades como Nuevo León y Jalisco.
POR PERLA RESÉNDEZ