Los grupos de poder regionales de todo el estado han empezado a moverse de cara al proceso electoral del 2024.
Las definiciones están a la vuelta de la esquina y quieren influir en el tablero para obtener candidaturas.
Mientras en Morena, el fin de semana dieron muestras de que Claudia Sheinbaum asumió en los hechos el liderazgo político de la 4T, en Acción Nacional sigue creciendo la disputa entre los tres principales bandos que convergen (o divergen, muchas de las veces) al interior del partido.
Lo que está en el fondo de esta competencia interna, si así se le puede llamar, son las candidaturas por las alcaldías y las diputaciones federales.
A Ismael García Cabeza de Vaca, todo hace indicar, lo van a dejar que vuelva a aparecer en la boleta por el Senado.
La duda radica en qué posición iría, pues hay una posibilidad latente de que la primera sea para la cuota de género.
En ese caso, circula el nombre de una priísta para competir en las urnas: la maderense Montserrat Arcos.
El problema para el senador es que si ese fuera el caso, el Frente Amplio por México tendría que ganar sí o sí la elección en Tamaulipas para que pueda repetir seis años más en la Cámara Alta.
Los puntos a favor de Montserrat para aparecer en la boleta son varios.
Primero su elocuencia, una capacidad para comunicar que demostró como una de las voceras en la campaña por la gubernatura, y que ahora la convertirían en una candidata sólida.
Por otro lado, vale la pena recordar que la priísta Beatriz Paredes decidió declinar sus aspiraciones en favor de Xóchitl Gálvez, lo cual, sobra decir, no habrá sido un mero gesto de buena voluntad, y mucho menos gratuito.
En la mesa de negociación de los partidos habrá muchas monedas de intercambio, aunque la del Senado es la más valiosa.
Claudia y la unidad
La visita de Claudia Sheinbaum a Tampico se distinguió por que, contrario a lo que suele suceder en los cónclaves morenistas, ahora sí reunió a todos los liderazgos y las corrientes políticas del partido.
Falta ver si eso de traduce en la unidad que ha pedido la coordinadora de la defensa de la 4T, o si se trató simplemente de una fotografía, pero hay que reconocer que tras la confirmación de Claudia como la próxima candidata a la Presidencia de la República, las tribus morenistas parecen haber entendido el mensaje.
En un encuentro que sostuvo con medios, la Jefa de Gobierno con licencia, lanzó una especie de advertencia a todos los interesados en competir por una candidatura, y que va en sintonía con lo que ha dicho el presidente López Obrador una y otra vez.
Primero, que nadie se salga de la fila y que privilegien la unidad.
Segundo, que confíen en el método de las encuestas que va a ser el único válido para elegir a quienes aparecerán en la boleta.
Y tercero, que haberla apoyado en el proceso interno que recién terminó no le da a nadie ventaja alguna.
Con el tiempo veremos si lo que dijo es verdad, y hasta qué punto, las tribus morenistas aceptan las reglas del juego.
POR MIGUEL DOMÍNGUEZ FLORES