CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- Al asegurar que el Acueducto El Cuchillo 2 y la Presa Libertad no serán suficientes para garantizar el abasto de agua en Nuevo León si no hay lluvias, el Gobernador de ese estado revivió el proyecto para tomar agua del Río Pánuco y también planteó la construcción de una planta desalinizadora en Matamoros.
Samuel García cambió su discurso de que el Acueducto 2 y la nueva presa resolverían el abasto por 10 años, señalando que se requieren más fuentes de abastecimiento.
«Si no llueve, no hay ducto que alcance (con) una crisis de cambio climático», expuso, advirtiendo que con las reservas actuales de agua podría sortearse el 2024, pero que es necesario explorar otras alternativas de abasto.
«Estamos ya estudiando la planta desalinizadora de la laguna de Matamoros y reactivar el proyecto del Pánuco», afirmó, «porque se van a requerir».
En el documento de se segundo Informe que García hizo público el 15 de octubre, antes de enviarlo al Congreso un día después, se afirma que hay avances en un nuevo proyecto, que se perfila a largo plazo.
«Se cuenta con un avance en el análisis y la demanda», indica el texto, «(así como) las trayectorias de la línea de conducción, donde una de las alternativas considera el abasto regional tanto para Nuevo León como para Tamaulipas.
«(También considera los) análisis de afectaciones, análisis de comportamiento hidráulico y necesidades eléctricas para la conducción, el aforo y la toma de muestreo para corroborar la calidad del agua en el punto previsto para la obra de toma».
Respecto a la desalinizadora, en el Informe expone que hay tres alternativas que implican: tratar agua del Golfo de México hacia la Presa Cerro Prieto; de la Laguna Madre, en Tamaulipas, hacia la Presa El Cuchillo, y un acueducto regional con Tamaulipas proveniente del Golfo de México, también hacia El Cuchillo.
En el mes de septiembre, el presidente, Andrés Manuel López Obrador declaró que el Acueducto del Pánuco es posible y que resolvería el problema del agua a Tamaulipas y Nuevo León, y el gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal Anaya, expresó que el proyecto propuesto por Tamaulipas es que resuelva primero las necesidades del estado y luego llevar el agua a la presa Cerro Prieto.
Durante su conferencia mañanera de este jueves, el presidente Andrés Manuel López Obrador habló de este proyecto y señaló que los gobernadores deben ponerse de acuerdo, ya que eso representaría pensar el futuro.
“Afortunadamente no hay estados mas hermanos que Nuevo León y Tamaulipas”, expresó, al tiempo que hizo un llamado a los gobernadores de Veracruz y de San Luis Potosí.
“Que se pongan de acuerdo, hay condiciones muy favorables, porque son muy buenos los gobernadores de los cuatro estados”, dijo el presidente López Obrador.
“Es cosa que se pongan de acuerdo, se puede llegar a tener acuerdos, hace falta también el agua en Tamaulipas y es cosa de compartir, de ponerse de acuerdo entre todos y hay estos mecanismos de compensación, pagos por servicios ambientales y puede funcionar muy bien”, mencionó.
López Obrador consideró que es necesario empezar ya los nuevos proyectos de abasto de agua para mediano y largo plazo: “Sí, pero se tienen que poner de acuerdo los gobiernos Veracruz, Tamaulipas, San Luis Potosí y Nuevo León, tener un acuerdo”, reiteró.
En aquel momento, Villarreal Anaya y García Sepúlveda tuvieron una conversación telefónica para trabajar sobre el tema y que sus equipos de trabajo definan la agenda en fechas próximas, para analizar la vialidad de este plan hídrico y así garantizar el abasto de agua a la población del noreste del país.
Viene el trasvase
En medio de una grave sequía, Nuevo León y Tamaulipas entran esta semana en la recta final para definir si habrá o no trasvase de la Presa El Cuchillo.
De acuerdo con el convenio de 1996 para aprovechar la presa, a más tardar el 1 de noviembre de cada año, es decir, este miércoles, la Conagua debe decidir si el embalse ubicado en el municipio de China, en Nuevo León, debe liberar líquido a la Presa Marte R. Gómez, que usan agricultores de Tamaulipas.
Aunque reconoció que El Cuchillo cuenta con poca agua, el presidente del Consejo Agropecuario de Tamaulipas, Jorge Luis López, pidió al menos un trasvase reducido.
«No hay mucho que trasvasar», admitió López, «pero la gente (de Tamaulipas) quiere que se haga, que se trasvase lo poquito que se tenga que trasvasar».
Al choque por el uso de agua, ambos estados ahora enfrentan diferencias sobre las mismas reglas del trasvase.
Según el convenio de 1996, El Cuchillo debe trasvasar el excedente si cuenta con más de 315 millones de metros cúbicos de agua y la Marte R. Gómez menos de 700 millones.
Pero el mismo acuerdo establece que si aumenta la extracción de la presa, cambian los requisitos y ahora no habría trasvase.
Luego de la inauguración en septiembre pasado del Acueducto El Cuchillo 2, que duplicará el envío de agua a Monterrey, la presa debe tener al menos 516 millones de metros cúbicos.
Actualmente, El Cuchillo almacena unos 480 millones de metros cúbicos, por lo que no se cumple el nivel para un trasvase.
No obstante, la semana pasada, Villarreal se reunió en la CDMX con el director de la Conagua, Germán Martínez, para analizar el trasvase.
Raúl Quiroga, Secretario de Recursos Hidráulicos de Tamaulipas, adelantó que en los próximos días Martínez visitaría el estado para dar información.
«Todo está encaminado», dijo Quiroga. «A esperar (el fin de octubre), a que se llegue la fecha, para que se tome la decisión, tal como está en el convenio».
Por Staff
Expreso-La Razón