En el periodo o fase del proceso electoral al que se conoce como intercampaña, los partidos políticos y los candidatos tienen prohibido hacer propuestas o promover a algún candidato o el voto de los ciudadanos a favor de cualquiera de ellos. El Presidente de la República no tiene derecho a participar en el proceso electoral, pero sí a ejercer libremente las funciones que corresponden a su investidura y en ese contexto el presidente López Obrador ha presentado un paquete de 20 iniciativas de reformas a la constitución y a las leyes.
Un buen número de estas reformas requieren de la mayoría calificada de las cámaras de diputados y senadores, es decir los votos de las dos terceras partes de cada una de las cámaras para ser aprobados. Ante las propuestas del Presidente, Xóchitl Gálvez y Marko Cortés dirigente del PAN coinciden en que son cortinas de humo, y el PRI afirma que “La postura de los grupos parlamentarios del PRI es única, unánime e inamovible: vamos a defender la Constitución y votaremos en contra de cualquier iniciativa que busque desaparecer los órganos autónomos, debilitar al Poder Judicial o desarticular el régimen democrático.”
Claudia Sheinbaum, a nombre de los dirigentes de la Coalición que la postulan, dijo “respaldamos las propuestas presentadas el día de ayer por el Presidente… como reformas constitucionales… que amplían y fortalecen los derechos sociales y humanos… fortalecen la democracia, las libertades, un gobierno honesto y austero, la soberanía nacional y por supuesto también la protección de los animales y la protección del medio ambiente”
Las propuestas presidenciales en este momento, como él mismo ha aclarado, tienen como fin que los ciudadanos sepan cuál es el proyecto de nación en el que ha trabajado durante su periodo de gobierno y que eso está en juego en las elecciones. Dicho de otra manera, ademas de la elección de Presidente de la República, los ciudadanos también estarán eligiendo entre dos formas de concebir al estado y al gobierno. Así que, en los hechos, las reformas de Lopez Obrador son una propuesta de modificación de la constitución y las leyes, y al mismo tiempo son una agenda para el debate nacional que tendrá lugar desde ahora, y en la campaña electoral a partir del primero de marzo y hasta los últimos días de mayo. El 2 de junio los ciudadanos elegirán entre las candidatas y la forma de gobierno que cada una representa.
Está por una parte el ofrecimiento de Claudia Sheinbaum, candidata de la Coalición Seguimos Haciendo Historia, de continuar la Cuarta Transformación y construir su segundo piso. Habla de la “construcción de la democracia, libertad, dignidad, derechos, justicia, y felicidad” lo que ella llama la vida digna del pueblo de México y explica, “El humanismo mexicano es un modelo propio, basado en nuestra historia, se trata… de que bajo el sistema actual del libre comercio, el estado siga teniendo el papel fundamental en la vida de la nación, que no todo se deje al mercado, que no renuncie a construir un verdadero estado de bienestar, que garantice seguridad, la paz, la soberanía y la prosperidad.” “Se trata de… que fortalezcamos la soberanía energética y alimentaria, que profundicemos la democracia y las libertades, y que… trabajemos para que México sea una potencia de bienestar y de sustentabilidad; que compartamos la prosperidad y la fraternidad y que dejemos la avaricia como máxima del desarrollo.” “Reivindicamos el derecho a tener un empleo digno, un salario digno, una vivienda digna, el derecho a la educación pública, a la salud pública, a la tierra del campesino o campesina, hablamos de la defensa de la dignidad humana y de la fraternidad, en pocas palabras, hablamos del humanismo.”
La respaldan Morena, el PT y el PVEM y los resultados del gobierno encabezado desde 2018 por el Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Por la otra parte, está la defensa apasionada de Xóchitl Gálvez de las instituciones vigentes para que se mantengan como están. La vida, la verdad y la libertad como ejes de su discurso, y su propuesta de trabajar “por el presente, por el futuro, por nuestros hijos. Para que los mexicanos podamos vivir con paz y tranquilidad. Para que México esté entre las 10 economías más fuertes del mundo. Para que aprovechemos el nearshoring y generemos mejores empleos con mejores salarios. Para que nadie muera por falta de medicinas o atención médica. Para que ningún joven deje de estudiar por falta de una beca. Para que los campesinos no se sientan abandonados y puedan seguir produciendo. Tenemos que aprovechar la mejor oportunidad en muchas décadas para traer las mejores inversiones del mundo.”
La respaldan el PAN, el PRI y el PRD y los resultados de los gobiernos encabezados en el siglo 21 por el Presidente Vicente Fox, el Presidente Felipe Calderón y el Presidente Enrique Peña Nieto.
Con reformas o sin ellas, hay material suficiente para el debate nacional, que de hecho ya comenzó.
POR JESÚS COLLADO MARTÍNEZ