En plena campaña para la elección de gobernador, el gobierno del PAN y la UAT, construyeron ‘legalmente’, la forma de ‘recuperar’ el dinero que sirvió para un fallido fraude electoral, pero al mismo tiempo, prepararon el camino para el saqueo millonario a la máxima casa de estudios.
Considerando las dimensiones y que la investigación, aún está en proceso, esto pudiera ser la “Estafa Maestra” del gobierno anterior en Tamaulipas.
Además, si el trabajo de la Contraloría de la UAT y de la misma Fiscalía, además de los resultados observados por parte de la Auditoría Superior de la Federación se confirman y se argumentan jurídicamente, el ex Rector de la UAT Guillermo Mendoza Cavazos, tendrá un serio problema por responder.
Supongamos que el ex Rector, se encuentra en los Estados Unidos, en qué etapa del proceso va decidir declarar y a qué está dispuesto, para transparentar el manejo de los recursos que finalmente autorizó.
Todo hasta hoy es incierto, se cuida el debido proceso y la presunción de inocencia, pero al ser el titular de la máxima casa de estudios, tendría que responder en primer plano por lo que hizo el ex gobernador Francisco García Cabeza de Vaca, Gerardo Peña ex Secretario General de Gobierno y Jesus Alberto Salazar Anzaldua, ex Secretario de Administración del Gobierno del Estado.
Con los elementos que hasta hoy existen, el gobierno panista, donó un terreno en Reynosa, con la autorización de la 65 Legislatura, cuando el grupo parlamentario del PAN tenía el control del Congreso; la donación fue a la UAT para compensar, una parte del presupuesto de participaciones que debería entregar el ejecutivo a la Universidad.
Fue un terreno valuado por el Ingeniero Maximino Ortíz Benavides en 187 millones 804 mil 094 pesos, por 60 hectáreas, cuando su valor es de 13 millones 081 mil pesos, es decir, un sobreprecio por más 174 millones de pesos y que hoy se está argumentando en una denuncia ante la Fiscalía General de Justicia.
La maniobra ‘legal’, fue hecha por el estado y admitida, reconocida y aceptada por la UAT de Guillermo Mendoza Cavazos.
Aún más: El Informe de resultados de la Auditoría Superior de la Federación de la Cuenta Pública 2022 del Gobierno del Estado, se detectó que el ejecutivo entregaría a la UAT 1,691 millones 270.7 miles de pesos; sin embargo, las aportaciones estatales llegaron por 1,190 millones 355.5 miles de pesos.
De esta manera, la ASF, obtuvo en conclusión, y después de revisar los convenios, transferencias y gastos de la UAT que, el Gobierno del Estado en 2022, no le depositó 500 millones 915 mil 200 pesos y no cumplió con la aportación total para la UAT.
En el 2022, algunos, académicos, personal administrativo, dieron un salto de reclamo porque sus salarios no llegaban y a los que menos peor les fue, los salarios llegaron, pero sin compensaciones.
Los casi 600 millones de pesos, se destinarían para nóminas de la UAT, pero les dieron baje.
Tamaulipas estaba a unos días de las elecciones de junio. El 2 de junio del 2022, el Congreso emitió el decreto en el periódico oficial del Estado 65-167, para autorizar la enajenación y para entonces ya habían desaparecido más de 500 millones de pesos. La Estafa Maestra del PAN hasta ese momento, había obtenido un diez, pero habrá sinodales que llamarán a un examen final.
En la denuncia que presentó la UAT este martes, están involucrados los personajes citados, pero ¿quién más estaba enterado de esta estafa llevada como Peculado a la Fiscalía? ¿Quién se benefició del dinero de la UAT en las campañas electorales?, serán algunas preguntas que deberán salir conforme avance la investigación.
Golpe bajo
En el partido de Alito Moreno, se conocieron ya las listas de Diputados Plurinominales a Diputados Federales y resulta que ningún priista de Tamaulipas, aparece en ellas.
La verdad que es mucha la tirria que le tienen a los Tamaulipecos y eso que desde antes del 2016, hay muchos ex dirigentes estatales y municipales así como ex legisladores, le han sido fiel al panismo.
Por cierto que en el sur de Tamaulipas, el PAN sigue apareciendo como el brazo fuerte para las próximas elecciones, particularmente en Tampico, porque en Ciudad Madero, Morena va necesitar un trabajo extra.
Si bien es cierto que Adrián Osegura es el primer panista de Madero, también es verdad que Eramos González no deberá limitarse para hacer un tarea de conciliación con todos los grupos e incluso con el Alcalde de Madero porque se necesitan.
Lo que menos deben perder es la diputación federal, pero Adrián sabe que frente a Chucho Nader las cosas no serán fáciles, es un reto que, si llegará a ganar, entonces sí le dará la autoridad adicional para reclamar más espacios y despojarse de esas leyendas urbanas que lo han vestido al interior de Morena.
Por Arturo Rosas H.