CIUDAD VICTORIA, TAM.- Aunque se siguen produciendo miles de toneladas al año de sorgo y cítricos, dos cultivos principales que pusieron al Estado en el mapa del agro nacional y hasta internacional, la sequía ha ocasionado que sus agricultores opten por desarrollar cultivos alternativos que se adapten a la grave crisis hídrica que se sufre desde la década pasada.
El frijol y el maíz, ya no son tampoco fáciles de desarrollar, por lo que las extensiones dedicadas a estos se vienen reduciendo conforme han pasado los años y que las lluvias se han presentado en menor grado.
Por tal razón, el campo ha sufrido una evolución o un cambio obligado a descubrir nuevas opciones que no dependan de cierta cantidad de humedad y que no generen erosión a suelo por sobre explotación de mantos acuíferos.
Aproximadamente desde mediados del 2010 a la fecha se han establecido nuevas siembras que hasta hoy día han sido benéficas y se han mantenido incrementando su extensión agrícola ante el éxito obtenido.
Algunos cultivos que iniciaron como pruebas y que hoy día ya se encuentran situados dentro de lo que Tamaulipas produce en sus diferentes ciclos, son: girasol, la sábila, el aguacate, la soya, la canola, mismos que son materia resistente a las altas temperaturas y al estiaje qué por meses afecta a esta región de la República mexicana. Un producto alternativo de los más nuevos a implementar en Tamaulipas, es el “Guar”, una oleaginosa similar a la soya y al frijol que se adapta fácilmente al clima seco y sin agua.
Al respecto, el delegado de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER) Guadalupe Acevedo González detalló en entrevista para Expreso que desde hace tres años es que se arrancó con este cultivo en la Entidad, en una extensión que aún no está registrada pero que señala es amplia.
“Se está trabajando en un cultivo alternativo que se llama ‘guar’ es una oleaginosa de baja demanda de humedad y que puede ser una alternativa para productores sobre todo en la zona centro y sur del Estado y sobre todo en las más críticas de humedad”, dijo Acevedo González.
En el sur principalmente, la producción de girasol, se ha venido impulsando desde el 2018 tentativamente en el municipio de González, pero también en el norte como lo es Camargo y es que señalan sus productores qué esta ayuda a prevenir la “desertificación del suelo” y tiene un efecto regulatorio sobre plagas, malezas y enfermedades, y además aumenta la materia orgánica del suelo.
“El girasol es una opción rentable y una buena alternativa para la rotación de cultivos. Juega un papel importante en la zona ya que es un cultivo de ciclo corto, tiene menor requerimiento hídrico que el maíz y el sorgo”, expuso José Alberto Anzaldúa Zúñiga, presidente de Anzú Genética Seeds, promotores de dicho cultivo. Hacia el centro de Tamaulipas, en el altiplano, municipios como Jaumave y Palmillas, desde hace unos 5 años le han apostado a la siembra de sábila, producto local y nativo del cual sus propiedades medicinales y cosméticas pueden ser explotados en cantidad.
Actualmente se siembran en estos dos municipios más de 500 hectáreas (ha) de esta especie, pero se prendete superar las 2 mil en próximos años, pues se ha demostrado ser un cultivo de alta demanda en el mercado internacional.
Margarita Requena Pasillas, ex dirigente de la “Organización Emiliano Zapata” en el altiplano tamaulipeco, destacó a nivel Estado se cultivan 5 mil hectáreas de sábila, donde se producen hasta 22 toneladas por ha.
Y en el ámbito nacional, expuso que “Tamaulipas ocupa el primer lugar en producción de sábila con 158 mil toneladas al año”. Hacia el este y sur del altiplano, en municipios como Güémez, Padilla, Llera y Victoria, el aguacate Hass a tomado relevancia.
Hugo Pedro Ramos Reyes, es quien ha venido impulsando la siembra del llamado “oro verde” en dichas localidades, con miras de que Tamaulipas sea el máximo exportador del fruto por arriba de Michoacán.
Actualmente este cultivo representa en tierra unas 200 hectáreas con un continuo y rápido crecimiento. En Altamira, la soya también ha tomado una importancia que destaca, pues actualmente es catalogado como el mayor productor a nivel nacional en dicho tema pues son 40 mil hectáreas en todo el Estado las qué se siembran principalmente en el sur de Tamaulipas, donde lamentablemente el año pasado se perdieron unas 20 mil por culpa del pasado.
POR ANTONIO H. MANDUJANO
