TAMPICO, TAMAULIPAS.- Desde hace varias décadas que en la zona sur de Tamaulipas se plantearon diversos proyectos para contener y almacenar el agua dulce.
De acuerdo con el Diario Oficial de la Federación , con fecha del 4 de noviembre del 2011 que se habría emitido el decreto por el que se declara de utilidad pública la construcción de la presa «Tamesí» y demás obras conexas.
Así como la adquisición de los terrenos necesarios para la construcción de las zonas federal y de protección.
En ese momento, se expropia a favor del Gobierno Federal una superficie aproximada de 64,000-00-00 Has., de terrenos de propiedad particular en los municipios de Altamira, González y Tampico.
Sin embargo, el proyecto fue declarado inviable por el alto costo que planteaba para la federación.
La construcción, comparten los planos de la época, se pensaba edificar una cortina en la cuenca del Guayalejo-Tamesí, entre la colindancia de los 3 municipios.
La intención, era contener y evitar que 24 mil litros de agua dulce sean «devueltos» al cauce del río Pánuco o su ingreso a lagunas salobres de la región sur de Tamaulipas.
Los datos consultados, arrojan que el planeamiento original fue desarrollado a través de la Secretaria de Agricultura y Recursos Hidráulicos (SARH) a mediados de los años 80s.
Entre 2010 y 2011, el planteamiento fue declarado inviable por que entonces se consideró que tenia un costo elevadísimo para la administración federal, tras estimar una inversión de al menos 6 mil millones de pesos.
Hasta el ultimo dato que se tiene, se estimaba una inversión para realizar el proyecto ejecutivo con datos actualizados en mas de 80 millones de pesos y a la espera de su aprobación.
Los alcances de la presa, serian de beneficio directo para mas de un millón de usuarios de agua corriente, 21 comunidades rurales dedicadas a la actividad agrícola y ganadera en el sur de Tamaulipas, así como para 6 poblaciones agrícolas del Norte de Veracruz.
Por José Luis Rodríguez Castro
Expreso-La Razón