Quienes piensen que el delegado especial de Morena en Tamaulipas, Mario Llergo es el único responsable del caos provocado por las designaciones de sus candidatos a las Alcaldías en el estado, olvidan que el representante del partido no se manda solo.
Llergo había hecho las cosas medianamente bien cuando logró sacar sin contratiempos la primera designación en Ciudad Madero, en donde logró hacer que la mayoría de los aspirantes entendiera que sus posibilidades de ser competitivos estaban muy lejos de alcanzar al diputado federal Erasmo González Robledo.
El asunto empezó a complicarse una semana después, desde ahí empezaron a notarse mal las cosas, pero nadie en el partido en el estado se percató de que todo podría irse al carajo para ellos, en términos de percepción ante la ciudadanía. Nadie fue capaz de anticiparse a lo que vendría en los días siguientes.
Primero fue en Matamoros, después en Reynosa y el caso más claro del desaseo en la forma de seleccionar a los candidatos fue Ciudad Victoria, en donde la semana pasada se generó tal confusión que al final, lo único cierto es que por la impericia de Llergo y la carencia de habilidad de la dirigente estatal Yuriria Iturbe, se rompió de facto la coalición de Morena con el Verde y el PT.
El delegado anunció que el candidato de la coalición oficialista sería Jorge “El Tico” García en la capital, pero un par de horas después Morena desconoció los resultados de la encuesta y confirmó que su abanderado sería el cuestionado Alcalde Eduardo Abraham Gattás Báez, amenazando inclusive con romper el acuerdo de coalición. El quiebre de la alianza fue inevitable.
Y aunque en primera instancia se culpó a Llergo y al Verde de causar el problema que puso en riesgo la unidad de la coalición, en el fondo nadie se ha cuestionado si realmente Mario Llergo actuó por iniciativa propia, si cedió a ofrecimientos de la dirigencia que encabeza Manuel Muñoz para “madrugar” a Gattás. O si es parte de un plan para fortalecer al Verde.
Y de nuevo, la pregunta, ¿Es Mario Llergo el culpable del caos en el que se metió el partido en tres de las ciudades más importantes del estado?
En lo personal no lo creo, como tampoco que haya estado actuando por iniciativa propia o sin la aprobación de su dirigente nacional, Mario Delgado. Algo no cuadra.
LO REPROBABLE: DESAPARECER DE NUEVO A LOS DESAPARECIDOS
Desde hace tiempo, organismos no gubernamentales y asociaciones de madres y padres buscadores habían advertido que el gobierno de López Obrador estaba actuando de manera poco ética y más bien con un sesgo claramente ruin, al pretender ocultar o cuando menos, reducir las cifras oficiales de personas desaparecidas.
En este sexenio, el número de homicidios dolosos es igualmente alarmante y escandaloso por su enorme cantidad, tal como las desapariciones. Son dos asuntos pendientes que la Cuatroté no ha podido resolver de manera satisfactoria.
Una de las principales causas es la actuación impune de la delincuencia, que con sus diversas actividades ilícitas generan terror, inseguridad y violencia en todo el país.
El control por parte de grupos criminales de amplias franjas del territorio nacional es un fenómeno reconocido internacionalmente, menos por quienes deberían combatirlos.
En ese sentido, en los últimos días, la Secretaría de Gobernación acaba de darle la razón a quienes señalaron reiteradamente el intento por reducir el número oficial de desaparecidos, para tratar de minimizar el impacto negativo en la imagen del gobierno federal.
La Comisión Nacional de Búsqueda dice que en México hay, unos más unos menos, más de 114 mil personas desaparecidas, pero el gobierno de Andrés Manuel afirma que son menos de 100 mil, porque se han encontrado unas 20 mil personas que estaban en esa condición. Por donde se vea, las cifras no concuerdan.
Lo que sí cuadra es la confirmación de que así como se minimiza el alto grado de violencia, de impunidad con la que actúan grupos criminales y de la cantidad alarmante de homicidios dolosos, López Obrador sigue empeñado en querer atenuar el enorme golpe a la imagen de su gobierno.
Ya no digamos su falta de empatía con las madres y padres buscadores, que ese es un tema aparte e igualmente criticable.
Lo que en este caso indigna es el intento burdo por querer desaparecer de los registros oficiales a las decenas de miles de personas desaparecidas.
Es su revictimización y la de sus familiares, sin el menor rasgo de solidaridad y consideración.
LOS CANDIDATOS A DIPUTADOS DE MORENA
Morena anunció el domingo los nombres de sus candidatos a diputados locales. Por los municipios del sur, Marcelo Abundiz Ramírez, Cinthia Elizabeth Jaime, Claudio de Leija, Úrsula Salazar y Sabrina Morales.
Para Marcelo era el movimiento natural después de competir por la candidatura a la Alcaldía.
La señora Jaime, exvocera de Armando Martínez, es candidata porque prácticamente no hay cuadros femeninos en Morena y había que asignar esa nominación a quien fuera.
De Claudio siempre se dijo que no le alcanzaba para ser candidato a la Alcaldía y si acaso, para una diputación y ahí está la confirmación a duras penas.
En cuanto a Úrsula y Sabrina -ambas participantes en una marcha proselitista hace semanas-, la designación de la primera es una salida para la presidenta de la Junta de Gobierno del Congreso y la de la joven Morales, la cuota que corresponde al Partido Verde.
De todos, quien tiene el reto más cuesta arriba es Sabrina. La que tuvo la candidatura por suerte, Cinthia, quien llegó desplazando a los verdaderos militantes morenistas.
Por. Tomás Briones
abarloventotam@gmail.com