“No se puede estacionar aquí”, advirtió una señora al conductor de un vehículo que se estacionó frente a su casa. “Quítese, este es el lugar de mi esposo”, sentenció.
La mujer con tono amenazante quería que quitaran la unidad porque, según ella, le corresponde por derecho el lugar. A lo que un oficial le dijo que lo que estaba haciendo era un delito, que se conoce como extorsión. “Todo lo que quiera cobrar en la vía pública es extorsión”, le precisó.
A lo que la mujer visiblemente molesta le respondió:
Cuando hagan sus derechos, ustedes cumplan con sus deberes, entonces sí, vengan y hagan sus cosas”, les dijo. “Vienen a extorsionar aquí a la gente, ¡váyanse!”, les señaló.
Al notar que el oficial de Jalisco la estaba grabando, lo amenazó: “A usted también le voy a tirar su teléfono”.
El uniformado le recordó que si le tiraba el celular, la iba a “tener que detener y llevar al juez”. Todo fue grabado y compartido en redes sociales.
La mujer le dijo que por qué la iba a detener. “Porque me está agrediendo, señora”.
Mujer se enoja porque se estacionan afuera de su casa. Es el lugar de mi esposo exclamó. pic.twitter.com/W37tUXjJcs
— Prófugos del Ácido Fólico 2.0 (@esdeprofugos2) March 20, 2024
De acuerdo con la señora, era ella la agredida. “¿Y ustedes no me están agrediendo? Yo no estoy haciendo nada, nada. Nada estoy haciendo”.
Tras ello le insiste al conductor del vehículo aparcado frente a su casa: “Oiga, usted no se puede estacionar, porque aquí es el lugar de mi esposo”.
Nuevamente el policía le recuerda su error y le precisa que en caso de hacerle algo al vehículo, se “va a ir detenida”.
Sin embargo, la doña les insiste que quienes se están apoderando de las calles son ellos. “No señora, usted es la que se está apoderando de la vía pública”, le precisa el oficial.
Gabriel, Gabriel, metete por favor”, ordena la señora a un joven que graba la discusión. “Le voy a hablar a Rocío para que venga”, menciona la mujer.
Ustedes cuando hay partido se adueñan de la fachada de las casas”, menciona la mujer a los oficiales. “En mi casa yo puedo aparcar a mi esposo”, menciona.
“Usted tiene derecho a que no les obstruyan su entrada, nada más”, explican.
¿Y el coche de mi marido, dónde lo voy a dejar? Yo tengo cuarenta años aquí y nunca había venido como ahora que entró (Enrique) Alfaro, a robar a…”
Tras ello insulta al oficial: “Váyase mucho a la chingada” y los trata de intimidar con agua.
CON INFORMACIÓN DE EXCÉLSIOR