CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- Por indicaciones del gobernador Américo Villarreal Anaya, la Secretaría de Seguridad Pública puso a disposición de la Fiscalía General de Justicia del Estado el informe relacionado con el incidente de uno de los hijos del exgobernador Francisco García Cabeza de Vaca en hechos con apariencia de delito, suscitados el pasado 3 de septiembre.
Ese día, el ex mandatario panista publicó en sus redes sociales que uno de sus hijos había sido interceptado por hombres armados.
La Vocería de Seguridad de Tamaulipas informó que hasta el momento no se ha presentado una denuncia de hechos; sin embargo, la indicación del gobernador es que se proceda conforme marca la ley y que sea la instancia investigadora la encargada de realizar las diligencias pertinentes y esclarecer las circunstancias en que se produjeron los presuntos acontecimientos.
«La absoluta convicción del gobernador es ponderar en todo momento la tutela del interés superior del menor, lamentablemente involucrado en estas circunstancias», mencionó.
«Resulta de la más alta relevancia para el Estado preservar, salvaguardar y garantizar la integridad de un menor de edad, cuya protección constituye un pilar fundamental en la gestión humanista del gobernador Américo Villarreal», agregó.
La Vocería de Seguridad recordó que antes de concluir su mandato, el exgobernador Cabeza de Vaca se autoadscribió más de 30 escoltas, quienes, a juicio de la actual administración estatal, no resultan idóneos para el desempeño de dicha función, ya que carecen de la validación de competencias y exámenes de control y confianza respectivos.
No obstante, el ex titular del Ejecutivo obtuvo una suspensión de amparo, por la cual solicitó que no fueran sustituidos o reemplazados por personal distinto al que había sido seleccionado por él.
«Este hecho resulta particularmente trascendente, pues de la narración de los hechos se deduce que el cuidado del menor en cuestión se dejó a cargo de personas no calificadas para desempeñar una función de esta naturaleza», mencionó.
Por Perla Reséndez
Expreso-La Razón