La zona sur de Tamaulipas genera un bloque importante de Diputados locales, que en teoría deberían de generar contrapeso político, pero lamentablemente llega cada “hijo de vecina” al Congreso estatal.
Desgraciadamente muchas veces tanto los que eligen a los candidatos a las urnas como en la lista de pluris, han elegido mal pero muy mal, y siempre somos los tamaulipecos los que pagamos los platos rotos y en esta legislatura que no fue la excepción, pues estuvo llena de Dinosaurios, de amigos, compadres y hasta de ignorantes políticos de traidores y hasta de vendidos, que solo llegaron a “patear el bote” y a cobrar por ir a calentar una silla, pues se convirtieron en unos “Ninis” , que ni trabajaron ni estudiaron, pero bien que estiraban la manita cada 15 días.
Nadie sabe de dónde llegó y quién apadrinó a Ángel Covarrubias, para que cumpliera su sueño de ser legislador, lo malo es que nunca sobresalió, pues se la pasó siendo el empleado del Gobierno anterior, y mejor se volvió mudo por temor a que lo regañaran.
Este cuate no tiene futuro político, no lo veo ni dando clases a niños de primer año del kínder.
La zona norte de Tampico, el municipio de Altamira y la mitad de Madero quedaron “huérfanos” de Diputados, desde la primer quincena que cobraron, pues nunca regresaron a las colonias y algunos pensaron, que con hacer cursos para maquillar piñatas y para vender cacahuates, ya con eso pensaron que generaron empleo y derrama económica, así de pequeña fue su visión.
Diputados que si juegan un “mano a mano” con unas carreritas con un bebé a gatas, pues, ganaría el pequeñín.
Este trío está condenado a pasar a formar parte de las filas del desempleo y en los Oxxos, ahorita no hay trabajo, para que ni vayan a perder el tiempo en hacer fila para entregar su solicitud.
En el municipio de Altamira, la guapetona de Nayeli Lara, solo la recordamos por las lonas que subsisten en algunas colonias, por qué no se le volvió a ver ni en pintura, se olvidó de los altamirenses y eso no se vale.
Su paso fue totalmente gris, mal aprovechó este puesto, pues solo se dedicó a cobrar pero nunca ayudó a su raza, por eso esta reprobada como diputada.
Pero, indudablemente el premio del “Trébol de la buena suerte” se lo lleva , indiscutiblemente, Jesús Suárez Mata, pues nadie lo recuerda como líder petrolero , bueno el que representó al sindicato Sección Uno, pero le quedó muy grande ese puesto.
No tiene carrera política, ni mérito, por eso hay que preguntarle con qué bruja va o con qué jabón se baña … ¿Será el de dinero Ven a mí ? … o a lo mejor usa canela o ruda, pero de que hay truco, hay truco.
Pero lo peor de lo peor fueron las ex morenistas que se vendieron por unos cuantos pesos, para darle a los guindas la “cuchillada como a los puercos” , para irse con los panuchos como son :Nancy Ruiz y Leticia Vargas, quienes solo pasaron a la historia como unas traidoras que no gestionaron recursos ni para traerles una caja de bombones a los altamirenses.
Los más sobresalientes de esta fueron Mon Marón y Carlos Fernández, quienes hicieron su chamba y siempre buscaron responderle a Tampico y Madero, desde su curul. Nora Gómez, hay sobrellevó las cosas.
Mientras que la tampiqueña, Úrsula Salazar, fue realmente quien se coronó como la más destacada y la que le puso la muestra a todo mundo de cómo se trabaja y de cómo dar resultados, pues lideró golpes bajos, grilla y toxicidades, donde salió triunfante.
Recuerde : ¡No se vale Chillar!