MÉXICO.-
A través de redes sociales se ha viralizado la historia de una mujer que se ha ganado una fortuna vendiendo chismes sobre sus vecinos, pues asegura que logró comprarse sus dos casas gracias a este ambicioso negocio. Además, no tiene pena de confesarlo, pues parece muy orgullosa de ser una “chismosa“.
Miryam, la mujer colombiana de 67 años que se hizo viral gracias a Ladydaniellag que subió su video en TikTok, ha logrado conseguir muchos seguidores y algunos se han mostrado interesados en conocer más sobre cómo inició este negocio y cómo ha logrado mantenerlo con el paso de los años.
Además, ha llamado la atención que no haya tenido problemas por difundir chismes sobre sus vecinos, ya que seguramente muchos no estarán contentos de saber que cuenta sobre sus vidas sin su permiso.
¿Cómo empezó su negocio de chismes?
Según Miryam, el negocio empezó gracias a su increíble memoria, su buen oído y su excelente habilidad para recaudar información, pues poco a poco comenzó a ofrecer a sus vecinos chismes a cambio de dinero. “Chismosa que se respeta en el barrio se la sabe todas. Averiguo todo”, confesó la mujer de que vive en el Quindío, Colombia.
Por otro lado, agregó que utiliza una libretita para anotar mucha de lo que escucha, pues de esta manera no se le escapa nada de lo que ocurre en su vecindario. A su vez, mencionó que, aunque parece silenciosa siempre está pendiente de las pláticas ajenas, por lo que se entera de todo. “Puedo estar hablando con usted, pero mis orejitas están bien paradas para escuchar lo que dicen aquí, allí, lo que pasa. A todo le voy tomando notitas para sacar buenos chismes, tengo una libretita y voy apuntando”, dijo Miryam.
¿Cuánto cobra por los chismes?
Además, detalló que dependiendo en nivel de información es lo que cobra. Por ejemplo, si una persona desea saber un chisme muy grande debe pagar más. “Los chismecitos flojitos son a 5 mil y 10 mil pesos (colombianos), pero cuando son chismes gordos, mejor”, puntualizó.
Asimismo, reveló que también recibe dinero por su silencio, pues muchos no desean que cuente lo que sabe, por lo que prefieren pagarle para que no diga nada. A su vez, detalló que los chismes que vende más caros son los de infidelidades, así que son sus preferidos de todos.
Por otro lado, comentó que es muy complicado manejar este negocio sola, por lo que su tía suele ayudarla en el negocio y también retiene información de utilidad sobre las personas del vecindario.
CON INFORMACIÓN DE EL HERALDO DE MÉXICO