ROMA, ITALIA.- El Papa Francisco celebró en la Plaza de San Pedro la Misa con el rito de canonización de 14 beatos, ante miles de peregrinos. El Santo Padre a través de su homilía dijo que Jesús hace preguntas para ayudar a cada uno a “discernir”.
“Porque las preguntas nos hacen descubrir lo que hay dentro de nosotros, iluminan lo que llevamos en el corazón y que a veces no sabemos. Dejémonos interpelar por la Palabra del Señor. Imaginemos que nos pregunta a cada uno de nosotros: “¿Qué quieres que haga por ti?” y la segunda pregunta “¿Puedes beber de mi mismo cáliz?”.
Francisco definió el estilo de vida cristiano es el “servicio” y no “el anhelo de poder”.
“El servicio nace del amor y el amor no conoce fronteras, no hace cálculos, se consume y se da. El amor no se limita a producir para obtener resultados, no es una asistencia ocasional, sino algo que nace del corazón, de un corazón renovado por el amor y en el amor”.
“Cuando aprendemos a servir, cada gesto de atención y cuidado, cada expresión de ternura, cada obra de misericordia, se convierten en un reflejo del amor de Dios. Y así todos nosotros —cada uno de nosotros— continuamos la obra de Jesús en el mundo.”
Nuevos santos, servidores de sus hermanos: Papa
El Obispo de Roma, dijo que estos nuevos santos, fueron “servidores de sus hermanos, creativos para hacer el bien, firmes en las dificultades, generosos hasta el final”.
“Bajo esta luz podemos recordar a los discípulos del Evangelio que hoy son canonizados. A lo largo de la agitada historia de la humanidad, ellos fueron siervos fieles, hombres y mujeres que sirvieron en el martirio y en la alegría, como el hermano Manuel Ruiz López y sus compañeros. Son sacerdotes y consagradas fervientes —fervientes— de pasión misionera, como el padre José Allamano, sor María Leonia Paradis y sor Elena Guerra. Estos nuevos santos vivieron según el estilo de Jesús: el servicio”
Los nuevos Santos son Giuseppe Allamano, sacerdote italiano fundador de los Misioneros y Misioneras de la Consolata, Elena Guerra, fundadora de las Oblatas del Espíritu Santo, la hermana Marie-Léonie Paradis, que fundó las Pequeñas Hermanas de la Sagrada Familia y once mártires asesinados en Damasco que rechazaron el Islam.
CON INFORMACIÓN DE EL HERALDO DE MÉXICO