CIUDAD VICTORIA, TAM.- Al no haber democracia ni igualdades, el hartazgo social se incrementó en el país. En marzo de 1908 una esperanza surgió para todos los opositores, pues el general Díaz declaró al periodista James Creelman de la revista británica Pearson’s Magazine, que se retiraría al finalizar su mandato sin buscar la reelección.
Al conocerse dicha entrevista en México, la situación política comenzó a agitarse y la oposición al gobierno cobró relevancia. En ese contexto, surgió la figura de Francisco Ignacio Madero González, quien realizó tres giras por el país, con miras a formar un partido político que eligiera a sus candidatos en una asamblea nacional y compitiera en las elecciones.
FRANCISCO I. MADERO EN TAMAULIPAS
El 16 de junio de 1909, el centro director antirreeleccionista de la Ciudad de México, anuncia que el 18 del mismo mes, saldrían en viaje de propaganda política a Veracruz, Tampico y Monterrey, los señores Francisco I. Madero y Félix F. Palavicini. Después de visitar Veracruz, el 8 de julio de 1909, arriban a Tampico. Sabedor de lo anterior, el visitador político permanente del Distrito Sur de Tamaulipas, Lic. José de Jesús Peña, prohibió cualquier reunión en lugares públicos; incluso presionó a los propietarios de teatros para que no facilitaran sus locales.
Sin embargo, el 9 de julio, Alberto Aragón y Manuel de León desafiaron las indicaciones y lograron alquilar el teatro “Apolo”, donde finalmente, ese mismo día se llevó a cabo el mitin maderista. Al partir, Madero tomó el ferrocarril a Monterrey, haciendo escala en Ciudad Victoria sólo de paso, pues no se tiene el dato de la realización de algún mitin.
A raíz de esta gira, se fundan en Tamaulipas clubes maderistas en los municipios de San Nicolás, Antiguo Morelos, Matamoros, Tampico y Ciudad Victoria. En Antiguo Morelos los maderistas se aglutinaron en dos grupos: Club Democrático “Benito Juárez” y Club Antirreleccionista “José María Morelos”.
El primero de ellos era integrado por vecinos del rancho de Fortines y eran liderados por el profesor Rodolfo R. Valencia; mientras que el segundo, con sede en la cabecera, lo conformaban Anastasio C. Martínez, Atilano Reyes, Genaro C. García, Carlos F. Topete, Pánfilo Galicia, Petronilo Holguín, Pedro Guerrero y Julián Núñez.
SEGUNDA VISITA A TAMPICO
El 3 de junio de 1910, procedente de Progreso, Yucatán, y a bordo del “México”, llega a Tampico el señor Madero, en viaje de propaganda. Lo reciben en el muelle, entre otros, el yucateco Alejandro Mackinney Huerta, quien después llegó a general. Celebran un mitin en un local proporcionado por el licenciado Alberto Aragón, haciendo uso de la palabra el candidato y Félix Fulgencio Palavicini.
Al concluir su gira, el coahuilteco continuó a Monterrey, ciudad donde es aprendido el 6 de junio por órdenes de un juez de Distrito de San Luis Potosí, acusado de incitar a la rebelión, por lo que fue trasladado y confinado en la prisión del Estado. Durante su cautiverio, el 26 de junio se verificaron las elecciones, resultando electos Díaz y Ramón Corral. Su compañero de fórmula, el tamaulipeco Francisco Vázquez Gómez, obtuvo 187 votos en su contienda por la vicepresidencia.
EL LEVANTAMIENTO ARMADO
Madero permaneció en prisión cuarenta y cinco días, siendo puesto en libertad bajo fianza, gracias a las gestiones del licenciado Pedro Antonio de los Santos; aunque sin la posibilidad de salir de la entidad potosina.
El 5 de octubre, vía telegráfica, el coronel Samuel García Cuéllar, jefe del Estado Mayor presidencial, ordenó su reaprehensión, ordenando al jefe de la Zona Militar de San Luis Potosí, que, una vez cumplida la orden, simulara un alboroto en el cual debería ser suprimido Madero y su abogado.
El oportuno aviso del telegrafista José M. Portillo, quien era maderista, a un colega en San Luis de nombre Luis Rubén Durán, hace que el doctor Rafael Cepeda se entere y avise a Madero, quien, al siguiente día, disfrazado de ferrocarrilero huye de la ciudad, dirigiéndose a Nuevo Laredo. Estando en esa población tamaulipeca, cruza el día 7 hacia Estados Unidos. Desde la ciudad texana de San Antonio, lanza el “Plan de San Luis”, el cual había redactado el día que fue notificado de su reaprehensión, y en el que llamaba a los mexicanos a levantarse en armas el 20 de noviembre de 1910.
LA “BOLA” EN TAMAULIPAS
El 24 de noviembre hubo un motín en la hacienda de un americano en el Cantón de Tantoyuca, Veracruz, en donde murieron dos gringos. A pesar de eso, las autoridades porfiristas hablaban de que reinaba la calma en Tampico y sus regiones adyacentes.
El 26 de noviembre, a raíz del levantamiento armado en el país, el congreso de Tamaulipas dio un voto de confianza al general Porfirio Diaz y a su gabinete. A principios de diciembre de 1910 se aprestaba a levantarse en armas en Tula, el profesor Alberto Carrera Torres, pero el gobierno se dio cuenta y lo mandaron aprender.
El oportuno aviso de un amigo telegrafista hizo que éste huyera y se refugiara en Zaragoza, Nuevo León, en la casa de un amigo, desde donde continuó con los preparativos. Por órdenes del general Porfirio Díaz, el 8 de diciembre salió de la CDMX con rumbo a Tamaulipas, un coronel de su Estado Mayor de nombre José F. Montesinos, quien organizó en Tula el Regimiento de Voluntarios de Tamaulipas.
La finalidad de dicha unidad era salvaguardar la paz publica en caso de ser alterada por un brote rebelde. Formaban parte de esos 150 hombres, el mayor Carrillo, el teniente Molina y el subteniente Domenzain. Carrera Torres organizó su pequeño grupo de revolucionarios en villa Zaragoza, el llamado “Ejército Libertador de Tamaulipas”, e intentó en varias ocasiones tomar el pueblo de Tula.
Como sus esfuerzos fueron vanos, decidió retirarse a la sierra de Guadalcazar, en donde estableció su cuartel general y trabajó para engrosar sus contingentes y darles una mejor preparación y organización militar. En enero de 1911, Emilio Portes Gil, José Domingo Lavín, Candelario Reyes y un grupo de amigos, organizan en Ciudad Victoria la Sociedad Democrática Estudiantil, en apoyo a Madero, realizando una gira cívica por toda la entidad. A principios de mayo rebeldes maderistas se pronuncian contra el gobierno porfirista en los municipios de Hidalgo y Villagrán. El 6 de mayo se reciben noticias en San Luis Potosí, en donde se informa que 500 hombres procedentes de Ciudad Valles se dirigían hacia Tampico y que se acrecentaban disturbios cerca de Ciudad Victoria.
El 10 de mayo de 1911, Pascual Orozco y Francisco Villa tomaron Ciudad Juárez, Chihuahua, dando un fuerte golpe al régimen nacional. El 21 de mayo se firmaron los Tratados de Ciudad Juárez, donde Porfirio Díaz y Francisco I. Madero se comprometen a un cese al fuego. Ese mismo 21, fuerzas de Alberto Carrera Torres asaltan y toman Tula, ante la ausencia de Montesinos, quien andaba en Dr. Arroyo, resistiendo solamente el policía Timoteo Uresti, quien pronto fue puesto fuera de combate.
El 23 de mayo establecen en esa ciudad el primer ayuntamiento revolucionario en Tamaulipas. El 25 de mayo el presidente Díaz presentó ante el Congreso de la Unión su dimisión como mandatario, tratando así de evitar un conflicto de mayores proporciones.
POR MARVIN OSIRIS HUERTA MÁRQUEZ