CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- La veneración de la Virgen de la Covadonga patrona de los asturianos españoles radicados en Ciudad Victoria, fue una de las celebraciones o fiestas religiosas de mayor relevancia desde las primeras décadas del siglo XX. La Colonia Española de aquellos tiempos, integrada por destacados comerciantes de la localidad puso en práctica esta tradición, como parte de la veneración a la Virgen María a quien se le brinda tributo en la península ibérica el ocho de septiembre de cada año.
Entre misas, rosarios, himnos, corridas de toros, kermeses, romerías y procesiones, desde la época colonial la ceremonia en honor a la Virgen de la Covadonga se extendió siglos después hacia diversas localidades de México, entre ellas Puebla, Oaxaca, Distrito Federal, Guanajuato, Monterrey y otras ciudades. Lo mismo sucedió en poblaciones tamaulipecas, por ejemplo Tampico y Ciudad Victoria.
Mamerto Madrid y otros Asturianos
De acuerdo a la Matrícula de la Sociedad Española de Beneficencia en Ciudad Victoria, durante las primeras décadas del siglo XX existían 295 ciudadanos de origen ibérico, originarios de distintos lugares entre ellos Santander, Ávila, León, Lugo, Vizcaya, Burgos Salamanca, Oviedo, Coruña, Almería, Madrid y Valladolid entre otros. Respecto a los provenientes de Asturias se encuentran Heliodoro Haces Madrid, Manuel Haces Madrid, Alonso Rodríguez Noriega, Carlos Ruisánchez y Mamerto Madrid.
Uno de los personajes de ascendencia asturiana que dejó un breve testimonio sobre su presencia en Victoria fue Mamerto Madrid, originario de Llanes, Provincia de Asturias, España de donde salió a los 18 años. Después de estar varios años en Cuba y sobrevivir a la guerra de Maceo y en 1903 sobrevivió de una epidemia de fiebre amarilla en Veracruz. Llegó a Ciudad Victoria en 1909 y permaneció aquí hasta su muerte en 1927. Se dedicó al comercio y fue oficinista; en los inicios de la Revolución Mexicana había acumulado cerca de medio millón de pesos producto de su trabajo, los cuales perdió con motivo del movimiento armado quedando en la miseria.
En una entrevista en 1925, se quejaba amargamente de su suerte y abandono por algunos de sus compatriotas “…y en edad en que ya no puedo luchar. Al preguntarle la opinión acerca de la Colonia Española en Ciudad Victoria, espeta lo siguiente: Como en todas partes hay honrosas excepciones, pero es una lástima que algunos de mis paisanos anden sueltos habiendo tan hermosos presidios. Yo señor tengo mucha historia…Los años me han dado mucha filosofía y gracias a esto puedo a mi edad tolerar ciertas cosas, pero tengo la espina dorsal muy dura para doblegarme.
“Y a pesar de todo esto, yo deseo que nadie desdeña a la Colonia Española…Si tengo un momento de lucimiento antes de estirar la pata, haré la advertencia de que no se moleste ninguno de mis paisanos en enterrarme, que me tiren en el carro de la basura para servirle de ejemplo y remordimiento a más de cuatro sinvergüenzas.” Don Mamerto, murió en el abandono de tuberculosis pulmonar en 1927, según diagnóstico del doctor Felipe Pérez Garza y fue sepultado en el Cementerio Municipal del Cero Morelos.
Primera Reina de los Asturianos Victorenses
Durante la primera década del siglo XX, existía en la capital tamaulipeca el Casino Español o Casino de Victoria en la calle Hidalgo. En 1925 se celebraron por primera vez en este lugar las Fiestas de la Covadonga, organizadas por una mesa directiva de origen español. La primera reina fue Isabel Loperena, coronada en u acto solemne por el gobernador Emilio Portes Gil el 7 de septiembre. En mandatario le entregó el cetro y le colocó una diadema de piedras preciosas.
La Revista Victoria le dedica un reportaje con los detalles del momento “…en su casta frente de virgen morena…Estoy profundamente agradecida por el alto honor que se me ha dispensado al elegirme reina de las Fiestas de la Covadonga, y espero que el entusiasmo que hoy confunde a españoles y mexicanos sirva para consolidar más y más los vínculos de cariño que deben unir a los hijos de la gloriosa España, con los de nuestra idolatrada heroica Patria Mexicana.”
Las damas de la corte de su majestad Isabel, estaba integrada por damas y niñas pertenecientes a lo más granado de las élites victorenses, ataviadas con vestuarios propios de la época. Una fotografía de M. Siller publicada en la Revista Victoria, muestra la elegancia. La princesa era Manola Díaz, además de Esther Balboa, Chelina Garza, Consuelo Garza, Ana María Collado, Alicia Montelongo, Alicia Guerra, Alicia Alcalá, Paquita Robles, Nazaria Pier, María Luisa Treviño y Oralia Guerra.
Ese año el comercio representaba una de las primeras fuentes de ingresos y trabajo para los victorenses. Destacaban por lo bien surtido la tienda de ropa y calzado La Esmeralda de Amraham G. Mansur en la calle Hidalgo. La Tlapalería, Ferretería y Plomería de los Hermanos Higuera. Para entonces los chinos Loo Fong, Juan Fong Sing, Enrique Chew habían establecido sus tiendas y estudio fotgráfico en el centro de la ciudad.
Si hablamos sobre diversión para varones, podían acudir al Salón Lerma “Cantina y Billares, con Lunch y Música todos los días. Licores y Vinos Legítimos.” Lo mismo había diversión en Los Bohemios un expendio de cerveza, atendido por L. Téllez Girón “El mejor establecimiento en su género. Departamentos privados. Depósito de la exquisita bebida Corilopsis de Japón y la siempre preferida cerveza de barril Kloster y Alemana.”
Todavía a mediados del siglo pasado, la Colonia Española de Ciudad Victoria celebraba las tradicionales fiestas de La Covadonga del 7 al 10 de septiembre con bailes, verbenas y feria popular donde se reunían gran parte de la alta sociedad capitalina. Mientras tanto en Tampico, hacia 1962 era reina de La Covadonga de aquel puerto la señorita Carmencita Ruiz Diez, quien durante las ceremonias solemnes lucía elegantes atuendos de Manola confeccionado en alta costura, mientras en sus manos sostenía un abanico español.
A partir de la década de los sesenta, la presencia de las fiestas de la Virgen de la Covadonga desapareciendo del escenario social de los victorenses. Lo mismo sucedió con la generación de los migrantes españoles que arribaron a Ciudad Victoria a finales de la década de la centuria antepasada y principios de la anterior al siglo XXI.
(Calendario de Fiestas de México/Dirección General de Turismo/1953/Francisco del Río y Cañedo/México, Distrito Federal,/Revista Victoria/1925/Family Search/Acta de Defunsión de Mamerto Madrid).
Por. Francisco Ramos Aguirre