CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- El incremento en los costos de los insumos para la preparación de alimentos, que oscila entre un 15% y un 20%, ha obligado a los restaurantes de Tamaulipas a ajustar los precios de sus platillos.
David Canales González, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (CANIRAC) en el estado, señaló que, aunque buscan no afectar significativamente a los clientes, es necesario implementar estrategias en los procesos de preparación para reducir gastos.
«Definitivamente, venimos arrastrando un incremento en precios e insumos que nos ha afectado desde hace un par de años.
Por ello, el sector restaurantero ha tenido que buscar alternativas en proveedores con precios más accesibles y crear estrategias de marketing y rediseño de menús que nos permitan solventar estos aumentos, especialmente en algunos productos de la canasta básica que impactan a todos por igual», puntualizó Canales González.
Añadió que, año con año, se ven obligados a aumentar los precios en los menús de los restaurantes, procurando que estos incrementos sean lo más moderados posible para que el cliente no lo resienta.
«Lo importante es no perder lo ganado tras casi tres años de pandemia. Sin embargo, también tratamos de buscar alternativas y estrategias en nuestros procesos que nos permitan generar ahorros en gastos y así no impactar tanto en los precios finales», explicó.
Canales González aclaró que el alza en los insumos es variable; algunos han aumentado más que otros.
De manera general, se ha registrado un incremento promedio entre un 15% y un 20%, lo que ha obligado a ajustar los precios de los platillos en proporción.
Esta situación afecta a toda la población, desde los hogares hasta las empresas dedicadas a la venta de alimentos.
Además, el aumento al salario mínimo, que entró en vigor el 1 de enero de 2025, ha impactado directamente a los restauranteros.
«Definitivamente, lo que sí nos afectó fue el aumento al salario mínimo.
Es un tema que nos tomó por sorpresa del 31 de diciembre al 1 de enero, y estamos obligados a pagar el nuevo salario mínimo, que equivale a 250 pesos semanales por empleado», señaló el líder empresarial.
A pesar de estos desafíos, los restauranteros buscan equilibrar el aumento de costos con la necesidad de no afectar demasiado la economía de sus clientes.
Por lo tanto, los incrementos de precios serán moderados, oscilando entre un 5% y un 15%, dependiendo de cada platillo y restaurante.
Es importante destacar que los empresarios mantendrán el buen nivel de servicio y la calidad de los alimentos para que los comensales acepten estos ajustes.
En resumen, el sector restaurantero de Tamaulipas enfrenta un panorama desafiante debido al incremento en los costos de insumos y salarios.
Sin embargo, mediante estrategias de eficiencia y ajustes moderados en los precios, buscan mantener la viabilidad de sus negocios sin afectar significativamente a sus clientes.
Por Salvador Valadez C.
EXPRESO-LA RAZON
