23 marzo, 2025

23 marzo, 2025

Vinculan a primer agresor por violencia vicaria en Tamaulipas

La víctima es una madre de familia de Ciudad Madero, quien dejó de convivir con su hijo desde los 5 años de edad.

ALTAMIRA, TAMAULIPAS.- Se realizó la primera vinculación a proceso por violencia vicaria en Tamaulipas, reveló la presidenta de la Barra de Juristas con Perspectiva de Género en Tamaulipas, Nury Violeta Romero Santiago.

El agresor llevará el proceso en libertad, pero no puede salir de la zona conurbada, tiene que firmar cada 30 días y no se puede acercar a la víctima, ni a ninguno de sus testigos y en caso de incurrir en una falta se aplicará la prisión preventiva.

La víctima es una madre de familia de Ciudad Madero, quien dejó de convivir con su hijo desde los 5 años de edad.

“Concluyó la audiencia y el Juez de Control determinó la vinculación a proceso por violencia vicaria, es el primero que se vincula en Tamaulipas y es el caso por el cual se impulsó en la entidad”.

En rueda de prensa, puntualizó que el dolor de la mamá lo arrastra desde hace diez años, “donde hubo denuncias falsas, usaron a sus hijos, donde usaron los procedimientos y actualmente no puede ver a su hijo adolescente porque el agresor vicario promovió amparos para que no hubiera convivencia por videollamada”.

Comentó que el hijo tenía cinco años cuando se lo quitaron a su mamá y en dos días cumple 15 años.

La violencia vicaria consiste en hacer sufrir a la madre por medio de interpósita persona, es decir que el padre usa a los hijos para violentar a la madre.

“La verdad aplaudo al poder judicial que tiene un juez en el sur que sí sabe lo que es violencia vicaria, hay un juez y ministerio público que se prepararon en este tema para que se diera la vinculación”.

La tutela del adolescente la tiene de manera provisional una hermana del agresor y la abogada espera que con la vinculación a proceso, el Juzgado Segundo Familiar tenga elementos suficientes para ordenar la entrega del menor a la madre.

La pena por violencia vicaria es de 4 a 8 años de cárcel, “ni con la pena máxima se puede subsanar lo que esta madre está sufriendo diez años”.

Por. Óscar Figueroa
La Razón

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