6 diciembre, 2025

6 diciembre, 2025

Vigila buque aguas del Golfo de México

La Marina despliega operativo especial desde hace una semana para evitar el ingreso de embarcaciones extranjeras, como la que se introdujo para rescatar fragmentos del cohete de SpaceX hundido en aguas nacionales

TAMAULIPAS, MÉXICO.- Desde el 21 de julio, la Secretaría de Marina Armada de México (Semar) ejecuta un operativo especial de vigilancia en el litoral tamaulipeco con el objetivo de impedir que embarcaciones foráneas, incluyendo las pertenecientes a SpaceX, extraigan de manera no autorizada los restos del cohete Starship 8 que permanecen en el fondo de aguas territoriales mexicanas.

La operación surge tras una denuncia presentada por la Asociación Civil Conibio Global, que alertó sobre tentativas ilegales de recuperación de fragmentos del cohete sin contar con las autorizaciones requeridas, situación que representaría una amenaza para la biodiversidad marina y el equilibrio ecológico de la región.

Especialistas han manifestado su preocupación por el potencial riesgo ambiental que representan los materiales del cohete, ya que su descomposición podría provocar la liberación de compuestos metálicos y sustancias químicas nocivas al ecosistema marino, convirtiéndose en un foco de contaminación.

La embarcación desplegada por la Marina tiene dimensiones de 88 metros de eslora y 8 metros de manga, características que le permiten patrullar eficazmente una extensa área marítima que abarca desde el norte hasta el sur de Playa Bagdad.

Entre las actividades del operativo se encuentran patrullajes continuos, identificación de incursiones no autorizadas y monitoreo de la fauna marina local.

Las autoridades navales enfatizaron que la presencia marítima tiene como propósito prevenir cualquier tentativa de extracción ilegal y asegurar el acatamiento de las normativas ambientales y de soberanía nacional.

De acuerdo con información proporcionada por la AC, SpaceX únicamente consiguió recuperar aproximadamente el 10% de los motores del Starship 8. El remanente de la aeronave permanece sumergido a una profundidad de aproximadamente 15 metros, en una zona caracterizada por su rica biodiversidad marina.

Esta situación ha generado el interés de embarcaciones estadounidenses por acceder a los restos sin cumplir con la regulación correspondiente.

La operación ha recibido el respaldo de autoridades locales y de la presidenta Claudia Sheinbaum, quien ha sido reconocida por su compromiso con la protección ambiental y la defensa de la soberanía nacional en territorio marítimo.

Residentes de la zona y medios de comunicación locales se han incorporado al esfuerzo, promoviendo la concienciación sobre la relevancia de preservar el litoral tamaulipeco ante amenazas tecnológicas externas.

Adicionalmente, las autoridades mexicanas advirtieron que cualquier intento no autorizado de recuperación de los restos del cohete será penalizado conforme a la legislación vigente, reafirmando su compromiso de salvaguardar tanto el territorio nacional como los recursos naturales del lecho marino.

El operativo se mantendrá por tiempo indefinido mientras persista la amenaza de incursiones no autorizadas.

Por. Staff

Expreso-La Razón

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