CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- El llamado “robo hormiga” representa para el comercio local pérdidas de hasta un 10% de sus ganancias mensuales, una problemática que supera en gravedad al asalto común, cuyos reportes han disminuido más del 40% en Ciudad Victoria, gracias a la estrategia de seguridad implementada, según la Cámara Nacional de Comercio.
Empresarios locales reconocen que el robo hormiga es un problema persistente que no ha podido erradicarse.
Además, los ladrones emplean métodos cada vez más sofisticados para sustraer mercancía sin ser detectados por las cámaras de vigilancia, por lo que los comercios han reforzado sus medidas de seguridad.
Miguel Manzur Pedraza, comerciante del 7 Juárez y propietario de tiendas de ropa y fruterías, advirtió que el problema no son los asaltos esporádicos, sino el robo hormiga, que solo puede detectarse durante los inventarios, cuando se comprueba que las pérdidas pueden llegar hasta el 10% de las ganancias.
En ocasiones, empleados disfrazan el robo sacando mercancía sin que inicialmente se note, y solo al evaluar las ventas se determina la magnitud del problema.
Comerciantes del centro histórico y también informales reconocen ser víctimas del robo hormiga, pues aunque sea poco lo que se llevan, las pérdidas afectan severamente sus economías, y en muchas ocasiones es imposible detectarlo a tiempo.
La Federación de Cámaras Nacional de Comercio en Tamaulipas confirma que la mayoría de los negocios ha invertido en seguridad, implementando cámaras internas y externas, alarmas y en algunos casos guardias privados, para reducir el riesgo de robos.
Abraham Rodríguez Padrón, presidente estatal del comercio organizado, explicó que la inversión en seguridad varía entre 5 mil y 80 mil pesos, dependiendo del tamaño del negocio y su vulnerabilidad.
Esta inversión incluye equipos y sistemas de alarmas que blindan a los comercios y facilitan la comunicación con las autoridades locales.
Las pequeñas y medianas empresas son las más afectadas por estos delitos, por lo que han comenzado a incorporar tecnologías para detectar robos, especialmente del tipo hormiga, que representan más del 5% de sus ingresos.
En Ciudad Victoria y municipios fronterizos como Reynosa, la Secretaría de Seguridad Pública ha instalado cámaras y botones de pánico en negocios con mayor incidencia de robos, conectándolos al C-4 para responder rápidamente ante emergencias. Tiendas de conveniencia y estaciones de gasolina ya están vinculadas a este sistema.
Por Salvador Valadez C.
EXPRESO-LA RAZÓN




