MÉXICO.- La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) realizó recientemente un estudio de calidad sobre distintas marcas de frijoles enlatados disponibles en el mercado mexicano, con el fin de orientar a los consumidores hacia decisiones de compra más informadas. Este análisis reveló diferencias notables en el contenido nutricional entre los productos industriales y los frijoles cocinados en casa, destacando que algunas marcas presentan niveles más altos de grasa y un valor proteico menor al esperado. Los hallazgos de la Profeco cobran relevancia ante la creciente dependencia de los alimentos procesados en la dieta cotidiana.
El estudio de calidad de la Profeco abarcó 18 marcas comerciales, entre frijoles refritos, bayos y negros enteros, en diferentes presentaciones y tamaños. Las pruebas evaluaron aspectos clave como el contenido de proteína, la cantidad total de grasa, el aporte calórico y la veracidad del etiquetado. Este tipo de análisis no solo busca proteger los derechos de los consumidores, sino también promover la transparencia en el mercado alimentario. Gracias a la labor de la Profeco, los compradores cuentan con datos concretos para distinguir qué frijoles enlatados ofrecen una mejor relación entre precio, calidad y nutrición.
Las 7 de frijoles marcas con mayor cantidad de grasa, según el estudio de Profeco
- Chata Frijoles Refritos Negros (430 g): 4,4 g
- Chata Frijoles Refritos Bayos (430 g): 4,3 g
- La Costeña Frijoles Negros Refritos (580 g): 3,8 g
- La Costeña Frijoles Bayos Refritos (580 g): 3,5 g
- La Sierra Frijoles Bayos Refritos (440 g): 3,4 g
- La Morena Frijoles Bayos Refritos (440 g): 3,3 g
- La Sierra Frijoles Negros Refritos (440 g): 3,1 g

Entre los resultados más relevantes, la Profeco identificó que ciertas marcas de frijoles refritos, como Chata y La Costeña, presentan cantidades de grasa saturada superiores a los 3 gramos por cada 100 gramos de producto. Este hallazgo resulta significativo, ya que los frijoles suelen ser considerados una fuente saludable de proteína vegetal. Sin embargo, el uso de manteca o aceites vegetales hidrogenados en su preparación industrial altera ese perfil nutricional. Por ello, el estudio de calidad advierte sobre la necesidad de moderar el consumo de estos productos, sobre todo en dietas que buscan reducir la ingesta de grasas saturadas.
Además, la Profeco subrayó que varios productos analizados mostraron un bajo contenido proteico, lo que desmitifica la idea de que los frijoles enlatados pueden sustituir completamente a los preparados de manera casera. Este resultado enfatiza la importancia de revisar las etiquetas y conocer la composición real de los alimentos que se consumen. El estudio de calidad incluyó también verificaciones del peso neto, masa drenada y precisión en la información nutrimental, garantizando que los datos del empaque correspondan fielmente al contenido.
Profeco recomienda a los consumidores priorizar los frijoles naturales sobre los industrializados, ya que ofrecen una mejor calidad nutricional y un menor contenido de grasa saturada. No obstante, para quienes optan por la practicidad de los productos enlatados, el organismo sugiere comparar las etiquetas y elegir las marcas con menor aporte de grasa y mayor contenido de proteína. Con este estudio de calidad, la Profeco reafirma su compromiso con la protección del consumidor mexicano y con la promoción de hábitos alimentarios más saludables.

CON INFORMACIÓN DE GUACAMOLE – RADIO FORMULA




