TAMPICO, TAMAULIPAS.- Entre pantallas, prisas y distracciones digitales, una voz insiste en recuperar un viejo refugio que hoy luce más vacío que nunca: la biblioteca.
La Doctora en derecho, Laura Alejandra Curiel Acosta, notaria pública once en Cerro Azul, Veracruz impulsa un proyecto de lectura que busca volver a sentar a la niñez y a la juventud frente a un libro, como antes: con calma, imaginación y cultura.
Curiel Acosta advirtió que el uso excesivo de dispositivos ya pasa factura. “Que nuestros hijos estén un poquito alejados de los dispositivos, hay estudios que revelan que los niños afrontan muchos problemas del cuello, físicos. Ya todas sus capacidades motrices no las desarrollan por los dispositivos. La tecnología no es mala, simplemente dosificarla… en cuestión de la lectura, no hay nada más rico que tener un libro en las manos, usar nuestra imaginación”
Su proyecto integra a autores como Rosario Castellanos, Alfonsina Storni y Santiago Posteguillo y mezcla lectura con música: piano y guitarra, para hacer que las historias cobren vida; la participación ha sorprendido.
“No hay edad. Tuvimos una niña cuenta cuentos de 4 años que lee mejor que muchos y fue maravillosa experiencia… en algunos cuentos se les pide que cierren los ojos para que imaginen el paisaje, los diálogos, los personajes”
La promotora cultural reconoce que asistir a las bibliotecas se ha vuelto una obligación escolar más que un placer, y advierte que eso debe cambiar.
“Revivir las bibliotecas… antes sí nos tocó ir, sacar el libro, cuidarlo, el silencio… se ha ido perdiendo. Ahora te metes al celular y con la IA ya sacas todo; no hay que perder esa delicia, el respeto por un libro”.
Propuso que docentes otorguen puntos extra a quienes realicen tareas usando libros físicos con evidencia de visita a biblioteca.
Curiel lamentó que la tecnología también expone a niñas, niños y jóvenes a contenido violento y noticias que generan tristeza o enojo, mientras madres y padres usan el celular como distractor constante.
Por lo que reiteró la necesidad de recuperar espacios seguros y formativos. La lectura de cuentos se realiza en la Notaría Pública 11 de Cerro Azul, Veracruz, con acceso gratuito; y dijo que están abiertos a acudir a bibliotecas y a escuelas de Tampico.
Las sesiones de lectura se transmiten en vivo a través de la página HuastecArte en Facebook.
Por. Cynthia Gallardo
La Razón




