CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- El sector de la construcción no tuvo nada que festejar el día del Albañil, debido a la crisis por la que atraviesa el sector, que provoca que el 50 por ciento de más de 4 mil trabajadores de la pala y el cemento estén sin trabajo debido a la falta de obras.
Hoy no se vieron a los alarifes adornando cruces como antaño, las pocas construcciones en la ciudad lucieron vacías ya que el festejo cayó en domingo y la mayoría lo utilizan para descansar de las agotadoras jornadas que realizan diariamente.
Los escombros, el cemento, palas, martillos y la carretilla descansaron ayer y muy pocos aparecieron en las obras preparando la mezcla para pegar el block o vaciar los castillos o dalas de las construcciones donde laboran.
Son muchas las historias y leyendas sobre la vida de los famosos albañiles, quienes se dicen expertos en decir piropos a las mujeres bonitas que pasan junto a la obra o como grandes catadores de todas las marcas de cerveza.
“La caguama nunca falta en la obra, porque soportar ocho horas diarias en el sol a veces con más de 40 grados centígrados”, platica don Ricardo González, quien labora en una construcción particular de la colonia Chapultepec.
Agregó que actualmente muchos compañeros sufren por la falta de empleo, ya que no hay trabajo, porque las obras están detenidas en la ciudad y sólo hay gente en la obra del puente de la Moderna, pero son pocos.
Indicó que se dedicó a este oficio, porque sólo estudio hasta tercero de primaria; sin embargo, las largas horas de trabajo y la necesidad lo obligaron a convertirse casi en arquitecto y hasta matemático, porque para sacar todo lo que se ocupa para cada obra, se tienen que hacer operaciones donde no se puede equivocar.
“Si me equivoco en las medidas de las mezclas se me cae el techo o si hago mal la cuenta capaz que cobro de menos y eso sería un gran problema para mí”, afirma.




