Nuevo León y Tamaulipas son, por decirlo de alguna forma, hermanos de sangre, compartimos kilómetros de fronteras estatales y hasta cárteles del crimen organizado, pero tenemos enormes diferencias, una de ellas es la actitud que ha tomado la Iniciativa Privada regiomontana comparada con la cueruda, por eso ayer la exposición de Fernando Maíz Garza ante la ‘pomposa’ clase empresarial del sur fue una especie de regaño, coscorrón por decir lo menos.
Así es mis queridos boes, el magnate de la construcción regio, en su calidad de Presidente del Consejo Cívico de las Instituciones de Nuevo León vino a Tamaulipas ayer a ‘echar en cara’, sin querer queriendo a la IP local por su poco involucramiento en el tema de la seguridad.
Y es que para el empresario regio queda claro que no sólo basta protestar, exigir, sino hay que arriesgar e invertirle, como ellos lo hicieron en las tierras que aún gobierna Rodrigo Medina.
«Hoy se los dije muy claro y directo: aquí todos ponen. Hay que poner voluntad por parte de los gobernantes; hay que poner recursos por parte de los gobiernos, pero también por parte de los ciudadanos… Son muchos los que ponen», dijo.
«Los recursos son limitados y creo que es nuestra responsabilidad sacarle mejor provecho. Tenemos que entender que vamos a salirnos de la protesta y pasarnos a la propuesta. Que los gobernantes tengan la voluntad de colaborar y abrir; que entiendan que ellos son los gobernantes, pero que tienen que escucharnos».
El tipo les advirtió, incluso, que hay que perder algunos privilegios para acabar pronto, trabajar de la mano de la autoridad y poner y proponer y hacer.
Les dio un dato que a más de uno de los asistentes a la instalación de la mesa ciudadana de seguridad le debe haber dado pena: en Nuevo León los empresarios aportan anualmente entre 40 y 50 miles de pesos para actividades específicas de prevención en seguridad, claro que con ello el gobierno tiene la obligación de oírlos, atenderlos con resultados.
Acá, hace unas semanas la Canaco de Tampico advertía que ellos no le entrarían con lana al tema.
Allá en Nuevo León, les restregó Maíz Garza los empresarios agrupados en las diferentes cámaras tienen en marcha desde hace varios años programas como: «Alcalde cómo vamos», «Observatorio ciudadano», «Pulsómetro», «Gastómetro».
Y lo vemos en la prensa regia, casi a diario hay noticias de dichos programas, la IP allá presiona con bases y coopera con la denuncia, el análisis.
«Aquí lo importante no es que vengamos a ver qué sacamos de la reunión, sino aportar y qué privilegios estamos dispuestos a perder. La lucha contra al delincuencia por una mejor ciudad o país es de todos, independientemente si traigamos uniforme o no», dijo a los reporteros tras su participación.
Pero decía que hay diferencia, porque allá en tierras regias lo mismo vemos a Maíz Garza que a un puñado de empresarios todos los días en la prensa hablando del tema de la seguridad.
Acá, ayer la reunión de instalación de la mesa fue encerrados ‘a piedra y lodo’, es más no se dio a conocer quién la preside, aunque alguien extraoficialmente nos dijo que es Luis Apperti, como para no perder la costumbre.
Pero sigo con las diferencias, miren, mientras los empresarios de acá tratan el tema en voz baja, corren apenas les tocas el asunto y alegan que es por su seguridad, ayer Maíz Garza salió ‘humildemente’ de la reunión, sin el aparato de seguridad que uno se imaginaría para alguien de sus recursos y abordado por los medios bajo de su camioneta y platicó por más de 10 minutos con los reporteros a quienes contestó hasta que ya no había más cuestionamientos.
Claro, claro, claro hay cosas positivas, la mera instalación de la mesa es un gran avance, que la IP local haya escuchado un caso de éxito es uno más, que el empresario regio les haya aclarado que hay que cooperar también lo es, que les pusiera ejemplos de cómo colaborar con programas, además del dinero también es un avance. Ojalá que pronto acá se estén replicando las experiencias regias.
Contemos lo bueno…
El martes, Tampico igual que buena parte de Tamaulipas, sufrió los embates de una tromba que dejó caer hasta 5 horas de lluvia.
Hasta el año pasado eso hubiese bastado para que la reseña hubiera dado cuenta de cosas peores, de tragedias que esta vez no ocurrieron. La razón: las decenas de millones de pesos que se enterraron en forma de un hidrotúnel bajo la avenida Ejército Mexicano que evitó la inundación mayor en buena parte de la ciudad. Nadie lo dijo, en su momento nadie lo notó, pero es justo mencionar que obras como esas son ‘amores’, como decía el anuncio.
De las campañas…
Mientras en Nuevo Laredo la candidata del PRI Yahleel Abdala no haya la puerta con contracciones, señalamientos y berrinches, enfilándose a la derrota, en Victoria ayer el también tricolor Miguel González Salum tuvo una de las mejores jornadas de esas que llaman de impacto en las calles de la capital.
Al ex alcalde lo acompañaron decenas de chavos que armaron la fiesta en el principal cruce del pueblo con música, zancos, pelucas y porras, arroparon al candidato.
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