CIUDAD VICTORIA, Tam.- En lo que resta de mayo continuarán registrándose lluvias extremas, granizadas y posibles tornados, situación que se ampliaría hasta el mes de junio, cuando inicie la temporada de huracanes en la región, advirtió el meteorólogo Marco Antonio Ibarra.
Destacó que estudios realizados por organismos como el Servicio Meteorológico Nacional, reseñan que para el mes de mayo y parte de junio se registrarán lluvias extraordinarias, las cuales pueden caer en zonas pequeñas provocando inundaciones o desbordamiento de ríos y arroyos.
«La temporada de huracanes inicia el primero de junio, sin embargo con la aparición de la tormenta tropical Ana, se adelantó más de 20 días, lo que representa un cambio en el clima».
Agregó que si bien el pronóstico de ciclones para esta temporada es bajo con apenas siete, esto no descarta que pudieran registrarse lluvias extremas y atípicas como las que se registraron en la región de San Fernando, donde en unas horas cayeron más de 5 pulgadas de lluvia.
Señaló que el cambio climático en el planeta, es uno de los factores que está provocando la presencia de estos fenómenos en Tamaulipas, donde se están registrando trombas y granizadas de forma repentina, por lo que está poniendo en riesgo a la población.
Indicó que ello ha sido ocasionado por los problemas de contaminación y la destrucción de recursos naturales en el estado, el cual tiene 500 mil hectáreas degradadas por la erosión, así como por el impacto ecológico causado por la perforación de pozos para extracción de gas en la zona de la Cuenca de Burgos.
Destacó que estos problemas ambientales no sólo se reducen a daños económicos que puedan causar, pues también incrementa las emergencias debido a los deslizamientos, avalanchas e inundaciones que contribuyen al calentamiento global de la Tierra al aportar carbono a la atmósfera.
Avala CNA las investigaciones
La Comisión Nacional del Agua, señaló que los estudios realizados sobre Madero, Tampico y una parte de Altamira, sitúa a esta región como una de las zonas de alto riesgo, incluso existen albergues temporales que están dentro de esta área de peligro.
El problema se registra en la cuenca baja del Pánuco, en particular la zona de Tampico, Madero y una parte de Altamira, porque históricamente es una cuenca muy difícil de trabajar, es impredecible.
Se estima que los especialistas advierten que cada 25 años se registran fenómenos de altos riesgos por lo que fue en 1955 el primero; en 1976 el segundo, por lo que todo indica que esta temporada podría ser la siguiente.
No se descarta que con el impacto de algún ciclón pudiera registrarse este fenómeno nuevamente.




